CALCAÑO, ant. y dial., del lat. CALCANĔUMtalón’, derivado de CALCAREpisar’.

1.ª doc.: Alex.; todavía en 1613 (Cervantes)1.

Hoy sigue vivo en Sanabria y Sur de León (Krüger, ASNSL CXLV, 129). El lat. CALCANEUM sólo se ha conservado en rumano (călcâiu), en retorrománico, en sardo y en algún dialecto italiano; además dejó alguna huella en el extremo Norte de Francia, y en algunas hablas gasconas de los Altos Pirineos y de la Gironda (FEW II, 62b): p. ej. caucanh ‘talón’ en Arrens (H.-Pyr.), caucanhous ‘charnela de puerta’ en Tarbes y Armagnac. La forma culta calcáneo [1728] solamente designa el hueso.

DERIV.

Calcañar [h. 1300, Gr. Conq. de Ultr.; APal. 437d, Nebr.], o con metátesis carcañal (Quevedo, Buscón, ed. Castro, p. 129; H. de Luna, Lazarillo, p. 113; hoy en Cespedosa: RFE XV, 278) o la forma intermedia carcañar (Cervantes, Casamiento Engañoso, Cl. C., p. 184; y vid. DHist.); más documentación en Cuervo, Obr. Inéd., 215.

Me faltan datos para juzgar si calcañuelo ‘enfermedad de las abejas’ es derivado de CALCAR o de calcaño, según parece probable.

1 Carcaño en el Coloquio de los Perros, Cl. C. II, 305, y en otro pasaje cervantino (DHist.). Forma debida al influjo de carcañal (V. abajo).