BOTELLA, del fr. bouteille íd., y éste de BŬTTէCŬLA, diminutivo del lat. tardío BUTTIS (vid. BOTA).

1.ª doc.: 1721.

Sustituyó en fecha muy moderna el clásico FRASCO. Aut. califica todavía de galicismo neológico. En los SS. XV-XVII se empleó también una variante botilla [Nebr.; Gili] que debió de tomarse del it. bottiglia, o quizá del prov. boutiho.

DERIV.

Botiller [h. 1400: López de Ayala], también botillero1, boteller, proceden del fr. ant. boteillier o del bearn. ant. botilher, derivados de boteille ‘botella’; botillería [1455, BHisp. LVII, 87; 1525, Rob. de Nola, p. 30]. Embotellar [Acad. ya 1884]; embotellado, embotellador.

1 En docs. aragoneses de 1068, 1073, designando un cargo palatino aragonés (M. P., Oríg. 282).