BELHEZ ‘vasija’, origen incierto, quizá árabe.

1.ª doc.: Ya en el S. XIII: «quanta ropa e quantas belhezes fallares» Biblia Med. Rom., Deut., 13.16; 1589-1607; belez 1609; belezo, 1552.

Perteneció a la germanía (J. Hidalgo) y hoy belezo es provincialismo de Valladolid, vid. F. de C. en RABM, 1875, p. 106, y sigue viviendo en el O. y E. de Castilla la Vieja: Cuéllar belezo m. «vasija para echar vino o aceite o cualquier líquido» (BRAE XXXI, 146), Ojacastro velezo «cuba o recipiente para echar vino» (RDTP X, 330). Belhezo doc. de Guadalajara anterior a 1539, BHisp. LVIII, 356. Belezo «small householdstuffe, as pots, pans, dishes» está en Minsheu (1617, vid. Gili), y belhezes «son retazos y cortaduras de lo que se cose y labra» (1601, Rosal), definición sospechosa por inspirarse en una etimología (imposible por lo demás), gr. pelecys ‘hacha’, pelycema ‘cortaduras y astillas’. Acaso la forma primitiva fuese *alhebezes, con metátesis *abelhezes, partiendo del ár. Ʌawâ’iǤ ‘enseres, objetos usuales’ (vid. ALJEMIFAO). Puede sospecharse que al influjo de belhez deba su terminación el mozár. binnîs «vas» (R. Martí, pp. 41, 620), léase pennés, de donde el and. pañés ‘cesto’ (AV), cuya raíz es la misma que la del port. panela ‘cazuela’, lat. PANNAsartén’ (para sus descendientes romances, vid. REW 6199; ZRPh. XLIII, 621; ARom. XIII, 180).