BAYADERA, del fr. bayadère íd., y éste del port. bailadeira ‘bailarina’, derivado de BAILAR.
1.ª doc.: Acad. ya 1884.
Del criollo portugués de la India balhadeira (procedente del port. merid. balhar ‘bailar’), pasó al francés colonial [1770] y desde el francés se popularizó en todas las lenguas europeas, sobre todo desde que lo empleó Goethe. Vid. Schuchardt, ZRPh. XIII, 512; Gonçalves Viana, Palestras Filológicas, 22-25; Richter, Tagliavini y Spitzer en VKR V, 1-20, y VI, 166-9.