ALMOCADÉN, ant., ‘capitán de tropa de a pie’, del ár. muqáddam ‘jefe’, ‘capitán’, participio pasivo del verbo qáddam ‘poner como jefe’.

1.ª doc.: 1256-63 (Partidas).

Dozy, Gloss., 167; Eguílaz, 227; Neuvonen, 156-7. También port. ant. almocadem1 ‘almocadén’, port. mocadão ‘patrón de barco en la India’, cat. ant. almugatèn ‘capitán de almogávares’ [2.° cuarto del S. XIV]. Variantes castellanas: almocadán (1.a Crón. Gral), almocatén (1577), almucatén, en un ms. de la Crón. Gral; almoacén, sólo citado por el Dicc. Militar de Almirante, es forma corrompida. Tallgren hizo notar repetidamente (Homen. a M. P., II, 709n. 1 ; y en Neuvonen) la dificultad que representa el traslado del acento, pues en esta clase de participios (2.a forma verbal) suele conservarlo sin modificación el hispanoárabe (comp., p. ej., Almodóvar, Almudévar < mu-dáwwar ‘redondo’); PAlc. vacila en esta palabra, dando 8 veces la acentuación muqédem y sólo 2 veces muqed(d)ém (en las dos acs. más populares ‘capitán de gente’ y ‘monarca, príncipe’). En consecuencia propone Tallgren derivar almocadén y las formas agudas de PAlc., del ár. muqdám, ‘lo que está puesto adelante’, participio pasivo de la 4.a forma del mismo verbo. Pero existen en PAlc. dos ejs. más de participios de la 2.a forma con la misma acentuación, y la grafía de PAlc. muqeddém ‘capitán’ indica que se trata realmente de la 2.a y no de la 4.a forma. Por otra parte la lista de ejs. de Steiger, 97, muestra casos contradictorios; y a ella se pueden agregar casos de contradicción palmarios entre los arabismos romances. Así junto a mozárabe < ár. mustárib, tenemos en romance la acentuación opuesta en su pareja y antónimo semántico mustá⺆Ǥim ‘el árabe que se halla establecido entre extranjeros’, que es el étimo indudable del port. Almoçagême (pueblo de Cintra: Silveira, RL XXXV, 69-70), y sin embargo ambos son participios activos de la 10.a forma; mustáɅlaf > almotaláfe es participio pasivo de la propia forma 10.a Todo ello da la impresión de un lenguaje vacilante y como zamarreado por influencias opuestas, vulgares y cultas, según corresponde a un idioma fronterizo y decadente como el hispanoárabe de la baja época. V. DELANTE.

1 Moraes acentúa almocádem (?).