AGOTE ‘paria, individuo perteneciente, a una generación postergada del valle de Baztán, Navarra’, del vasco kakote ‘gancho pequeño’, diminutivo de kako ‘gancho’.
1.ª doc.: Jovellanos († 1811).
Parece que en el Gers capots es palabra más abundante que cagot ―aunque esta última se encuentra en documentos medievales― (cf. capotus en Du C.), vid. Polge, Mel. Phil. Gers. 1959, 38-39 [quizá sea esta forma importante para la etimología de (c)agot(e), pero no veo cómo podría explicarse partiendo del vco. kakote] capots en el S. XVI en la Coutume de Vic-Fezensac (ibid., p. 40).
Levy, PSW I, 174 y 274 cita una poesía de Marcabrú, quien parece usar faire cogot en el sentido de ‘escarnecer’, hablando del gaig (‘arrendajo’) y refiriéndose a la primavera (en la que a los maridos demasiado celosos o complacientes les ponen loscuernos): «Quan l’aura doussan bufa / fai d’or-guoill cogot e bufa / e son ombriu li ramel». Faire bufa es ‘grimace, moquerie’ ‘plaisanterie, bourde’ en Gascuña y el Ródano (Mistral, TdF) y bufa o joc de bufa ‘burla’ en Flamenca 3690 y en una poesía publicada por Chabaneau de un ms. del S. XIV; Levy traduce fer bufa por «sich aufblähen, eingebildet sein» desorientado por una expresión castellana, tieso de cogote ‘altanero’, pero es evidente que esto no corresponde al contexto de Marcabrú, en el cual debe considerarse evolución de faire cogós ‘hacer cornudo’ (así en Brev. d’Amor), cogós ‘cornudo’ (Daudé de Pradas, R.Vidal de Besalú, en Rayn. II, 432) en lugar de los cuales debió existir cogotz en la época arcaica, aunque Levy lo ponga en duda; en todo caso consta coütz dos veces en el trovador de Toulouse G. Anelier (S. XIII), y el cat. ant. cuguç (con -ç) está documentado copiosamente desde los orígenes. Ahora bien, esto me sugiere que el vasco agote y bearn. cagot sean variantes más o menos vasquizadas de este cogot ‘cornudo’ y ‘escarnio’, bien partiendo de la primera idea o de la segunda, o de ambas a la vez.
No me he referido a la pseudoetimología tan repetida bearn. caa got ‘perro godo’ no sólo por su flaquísimo fundamento semántico-histórico, sino porque las razones fonéticas e históricas se oponen por igual a considerar gasconismo este vocablo sin viejo arraigo, todavía más vasco que bearnés.
Para la historia de los agotes vid. F. Michel, Histoire des Races maudites de la France et de l’Espagne, Sèvres 1846; R. de Rochas, Les Parias de France et d’Espagne, Paris 1876; Caro, Los Pueblos de Esp., 306. Del mismo origen es el bearnés cagot ‘paria’, ‘cretino’, de donde el fr. cagot [cagou en 1436]. En el origen parece designó a los leprosos, cuyas manos encogidas por el mal se compararon a un gancho, comp. cast. gafo ‘leproso’, de GAFA. Rohlfs, ASNSL CLXXI, 136. Baist, RF XIX, 634-5, cree que viene del bretón, lo cual es improbable. Otros (Bloch, etc.) han supuesto que viene del lat. CACARE ‘evacuar el vientre’, pero la forma navarra, que hasta ahora no se ha tenido en cuenta, prueba de un modo concluyente el origen vasco, pues es característica de este idioma la aspiración y pérdida de la k- inicial.