AGOBIAR, derivado del lat. vg. *GUBBUS, variante del clásico GIBBUSgiba’, de la que salió el it. gòbbo, gòbba, ‘giba’, ‘jorobado’.

1.ª doc.: 1604, Quijote1.

Agobiado significó originariamente ‘cargado de espaldas’ («¿No ves que éste es agobiado y es un poco más delgado y tiene mayores pies?» Ruiz de Alarcón), de donde agobiar ‘encoger, agachar la cabeza’ («Pensó Sancho que el cielo... venía a dar sobre su cabeza, y agobiándola lleno de miedo, la puso entre las piernas», Quijote) y luego ‘encorvar (el peso)’, ‘abrumar, angustiar’. Indicó esta etimología Cuervo, Dicc. I, 252-3 (y casi al mismo tiempo Parodi, Rom. XVII, 1884, 52-53), recordando que gubba y gupios ‘joroba’ se hallan en bajo latín2, y gob, gobbo, en retorrománico e italiano. Otros representantes más próximos al español hallamos en vasco: lab. gupi ‘curvatura’, ‘jorobado’ (S. XVII), ronc. kupi ‘con la cabeza agachada’, ‘jorobado’, kupitu ‘encorvar’, sul. kupüts ‘encorvado, jorobado’, vasco (Larramendi) gubiatu ‘encorvar’, gubi ‘curvatura, arco’; nótese, empero, que Azkue negó entrada al gubiatu y gubi de Larramendi (y a gubiate ‘bogenwerk’, gubiari ‘bogenschütza’, que serán también de Larramendi), así que gubi ‘curvatura’ debe de ser una interpretación seudoetimológica de gubi ‘gubia de carpintero’ y gubiata, -ate, -ari pueden ser perfectamente nuevas invenciones de Larramendi. Schuchardt, BhZRPh. VI 44, cree que son de origen romance, aunque duda entre relacionarlos con la voz castellana o con langued. gaubià, goubià, ‘encorvar’, prov. alp. cube, cupe, ‘encorvado’; pese a las reservas de Schuchardt parece plausible derivar todas estas voces de *GUBBUS. Una forma alterada de agobiar, quizá ya desde antiguo, presenta el santand. auyau ‘agobiado’; más arcaico es el ast. gobetu (Villaviciosa) ‘bovino que tiene una asta levantada y otra caída’ (V. s. v. bayón). Braune, ZRPh. XLII, 140, en vista del ingl. gob, gub, ‘bulto’, noruego gobb ‘zona de los hombros’, noruego dial. gûva ‘acuclillarse’, cree que gobbo y agobiar vienen del germánico, pero las citadas formas germánicas son de fecha moderna y su relación con las romances es muy dudosa. Quizá tiene el mismo origen que agobiar la palabra agobado que se aplica dos veces a una cama en una Cédula Real de 1642, si significa ‘curvado’ como sugiere el DHist.

DERIV.

Agobio (no en Acad. 1832, ni Gili; sin citar autoridades en DHist.); de ahí parece derivado el val. gobiós ‘avaro’ (en Pego: Barnils, Die Mundart von Alacant, 34).

1 La cita que el DHist. atribuye al Padre Ángeles corresponde al anotador moderno.―

2 Incurre en confusión G. de Diego al decir que Walde documenta en latín la forma *gubbus. Esta variante sería debida a influjo del gr. κǢưος ‘joroba’ según Ernout-M. y Walde-H., pero me parece más probable que haya simplemente labialización por influjo de la bb siguiente, en vista de que el proceso se repitió en fecha romance cuando ya la g- de gibbus estaba palatalizada, vid. AJOBAR.