ACIAGO, tomado del lat. aegyptiacus ‘egipcio’, que en la Edad Media se aplicaba a ciertos días del año considerados infaustos o peligrosos.
También port.
aziago íd. (Moraes), cat.
atziac íd. (Fabra),
abciac (en Auziás Marc, donde no está claro si significa lo mismo o ‘laborable, no festivo’), pero
egipciach dia ‘día infausto’ en el
Tirant: «Maleynt lo
egipciach dia del vostre trist naximent» cap. 227 (ed. Riquer, p. 661, verificado en la príncipe).
Օibsiyâqo aparece aplicado a muchos días del año en el calendario mozárabe escrito por el cordobés Rabí ben Zaid en 961 (Simonet, 163). Nebr. trae «
aziago: dies ater, dies Aegyptius». En un calendario borgoñón de primeros del S. XIV, 21 días del año llevan la indicación
d(
ies)
eg(
iyptiacus), vid. P. Meyer,
Rom. VI, 3 y siguientes y la demás documentación que éste cita. El fundamento de esta denominación es dudoso; véase Colón,
ZRPh. LXXVIII, 69, para la historia internacional del vocablo: según él, con esta denominación se aludía a los astrólogos egipcios; aunque otros piensan que hacía referencia a las plagas de Egipto
1. El vocablo fué tetrasílabo hasta el S. XVII (Berceo; Tirso,
Burlador, III, v. 858). Cej. IV, § 139. No está bien claro el tratamiento fonético de este vocablo semiculto, especialmente en portugués y catalán, donde esperaríamos la conservación de la G; quizá estos dos idiomas lo tomaron del castellano ya en fecha remota, por influjo de la literatura astronómica de Alfonso el Sabio, pues aquí se explica mejor la pérdida de la
g- en una forma elidida
*gepciago. Comp.
ESPÁCICO.