YARAVÍ, del quich. yaráwi íd.
Escribió el P. Cobo: «acarreábanlo en unos costales pequeños con un cantar llamado
araví» (
DHist.). No conozco otro testimonio de esta forma en cast. Hoy es corriente
yaraví, sobre todo en el Perú, también en Colombia, Arg. y Chile, como nombre de los cantos plañideros y sentimentales, de carácter amoroso o simplemente elegíaco, que se oyen a los indios y a muchos criollos. El antiguo diccionario quichua de Gonz. de Holguín (1608) sólo trae
haráhui «cantar amoroso, recuerdos de hechos agradables»; según los modernos es «la canción, poesía amorosa» (Middendorf), «elegía... canción doliente que cantaban por última vez los condenados a muerte», que según Lira estaría en relación con
harawa ‘horca, instrumento de suplicio’, ‘picota’ (éste no está en Holguín). En cuanto a
yaráwi f. sólo está en Middendorf y en Lira, y aunque tiene bastantes derivados no se ve otra palabra de donde pueda derivar. No puedo aclarar la relación existente entre
haráwi y
yaráwi. Acaso tenga relación con el duplicado
anacona =
yanacona (vid. Lenz y Friederici, s. v.), que ya aparece en el S. XVI. Se podría pensar que se relacione con el cambio de acentuación
yaráwi >
yaraví. ¿Se deberá éste a haber pasado el vocablo del quichua al guaraní?
1. Entonces podríamos considerar la
y- como un caso de la
y- facultativa propia de este idioma (vid. Lenz, s. v.
aguanés =
yaguané;
yaguará que en lugar de
aguará cito en
Anales del Inst.
de Etnogr.
de Cuyo V, 1944, p. 177; y aquí, s. v.
TIBURÓN). Pero esto es improbable, pues la forma
yaraví es hoy popular en el Perú, y lo es muy poco en la Arg., por lo menos en Tucumán (vid. Lizondo Borda) y en Mendoza, aunque M. A. Camino la cita en su glosario del Neuquén (
Nuevas Chacayaleras, p. 143). La acentuación aguda puede deberse sencillamente a la rareza en castellano de las palabras paroxítonas en -
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