VOLUNTAD, tomado del lat. volŭntas, -ātis, íd., derivado del verbo velle ‘querer’.
1.ª doc.: orígenes (Glosas de Silos; doc. de 1027, Oelschl.; Cid, etc.).
De uso general en todas las épocas, pero la conservación de la u prueba que en cast. estuvo desde los orígenes bajo el influjo del latín, lo cual no puede sorprender dada la desaparición del verbo velle o volēre en castellano. Es, pues, semicultismo, aunque muy pronto incorporado al fondo popular. En los demás romances (aun port. vontade, cat. ant. volentat) presenta tratamiento hereditario, aunque en varios de ellos hubo también influjo posterior del latín. Abundan las acs. secundarias, p. ej. de toda voluntad ‘con todo interés’ Berceo, Mil., 814a, etc.; Cej. VII, § 124. Tomada del nominativo voluntas existió una variante volunta, conservada en asturiano («alloquecer:... al probe q’y pasa tien perdía la volúnta», «alicierces: unu ubleru pa ubligar la volunta» R); de ahí se derivó luego el vulgarismo murc. volunto ‘cariño, querer’ (G. Soriano) y el arcaísmo jurídico voluntar ‘querer, tener voluntad (de hacer)’ (doc. 1219, M. P., D. L., 23.29). En la lengua de los trovadores hay formas análogas a éstas y bien documentadas desde el S. XII: volontós ‘deseoso, ávido, voluntarioso’ (p. ej. en el gascón Aimeric de Pegulhan, Appel, Chrest. 73.43) y volon(t), que todos recordamos de los versos del dulce Ventadorn: «tòut m’a mon cor e tòut m’a me / e se mezeiss’ e tot lo mon, / e quan si·m tolc, no·m laisset re / mas dezirier e cor volon» (Quan vey la lauzeta, v. 16). Esto debe de ser muy antiguo, y como es razonable admitir que se creara un lat. vg. *VOLUNTEM junto a VOLENS, según VOLUNTAS y la declinación (trans)euntem ~ (trans)iens, nos preguntamos si esto dejó huellas también en nuestra Península y si no habrá en estos viejos vulgarismos un resabio de la vieja lírica mozárabe tan emparentada con la occitana.
DERIV.
Voluntario [Corbacho, Mena (C. C. Smith, BHisp. LXI); APal., 533b], tomado de voluntarius íd.; cub. ‘deseoso, que hace con gusto una cosa’ (Ca., 244); voluntariado; voluntariedad; voluntarioso [APal., 10b: «affectiva: cosa v.»; «voluntarius» Nebr.]; volenter ant. (Berceo, Loores, 48) o volunter (Mil., 628; Alex., 211, 2088, 2285) ‘de buena gana’, tomado del cat. ant. volenter (o volonters) íd., forma popular de VOLUNTARIUS; contribuirían el oc. y fr. volontier(s) (de donde voluntier en Alex., 64). Otros cultismos derivados de la raíz de velle. Volición [Aut.], del lat. escolástico volitio; volitivo [íd.]. Veleidad [S. XVII, Aut.], del lat. escolástico velleitas; veleidoso [Acad. S. XIX]. Son también creaciones del lenguaje escolástico y filosófico noluntad y nolición, formados con el compuesto lat. nolle ‘no querer’, según el modelo de las palabras anteriores.
De la misma raíz que velle: lat. voluptas, -ātis, ‘placer’, y su derivado voluptuōsus, de donde voluptuoso [h. 1440, A. Torre (C. C. Smith); APal., 536b, quien también castellaniza el hoy desusado voluptad, ambos en Oudin, sólo aquél en Aut., ninguno en Covarr.]; voluptuosidad [Acad. 1925, no 1843].