TABAQUE ‘cestillo’, del ár. ƫábaq ‘fuente, bandeja’, ‘canastillo’.
1.ª doc.: 1331, invent. arag.
En catalán hay tabac, empleado sobre todo en el País Valenciano («tabaque, canastillo» Lamarca; «paneret, mesura», G. Girona, s. v. destabac), mall. agafar amb tabac ‘coger en falta’ (BDLC XII, 118), y hay otra variante tabà de igual significado y ya medieval, de la cual me ocupé en BDC XXIV, 41-43.
Es el ár. ƫábaq, voz muy antigua y extendida (definida «canistrum, calathum» está ya en el glosario de Leyden, 50, 54), ya clásica con el sentido de ‘bandeja, fuente’, pero que vulgarmente equivale más bien a una especie de canastillo; V. el documentado artículo de Dozy, Gloss., 341-3. El ár. ƫábaq se pronunciaba vulgarmente ƫabáq en España, y deriva normalmente del verbo ƫábaq ‘cubrir, cerrar’.
DERIV.
De este mismo verbo deriva el ár. taƫbîqa ‘chapa de hierro con cobre, provista de un clavo, que se aplicaba al arnés de los caballos, o se empleaba para herrarlos’, de donde el cast. tabica ‘tablilla con que se cubren los huecos que quedan entre las vigas colocadas sobre el arquitrabe’ [1633, Lz. de Arenas, pp. 182 y 37; Acad. ya 1817], ‘el hueco que queda en una pared entre los maderos que asientan sobre ella para formar el techo’ (Dozy, Gloss., 344; Suppl. II, 25b). En cuanto a tabahia que la Acad. [1884, no 1843] registra como sinónimo de tabaque, es palabra de aspecto sospechoso, no documentada en otras fuentes y que probablemente estará equivocada en su forma (¿quizá tabachia, grafía de tabaquía?).