RUINA, del lat. RŬզNA ‘derrumbe, desmoronamiento’, ‘ruina’.

1.ª doc.: Berceo.

«La Madre gloriosa... / Ella nos sea guarda en esta luz mezquina / que caer non podamos en la mala ruÿna» Mil., 865d. No es palabra frecuente en los clásicos de la Edad Media, aunque es posible que más o menos se empleara siempre; sin embargo falta en los glos. de h. 1400, Nebr., PAlc., y APal. al parecer la define solamente en calidad de palabra latina. De todos modos el fr. ruine ya se documenta desde 1180 y es frecuente desde 1213 (Rom. LXV, 501), y el vocablo es muy antiguo en todos los romances; luego es de creer que sería usual en cast. ininterrumpidamente desde Berceo. C. de las Casas: «ruyna: crollo, eccidio, esterminio, fracasso, gastamento, rovina, ruina, scoscio, sfaccimento, stroscio» (1570), y desde entonces es constante en la tradición lexicográfica; frecuente en el Quijote: «que todo ello [en la armadura] con espantosa ruyna vino al suelo», «que más parecían ruynas de edificios», «podía escusar toda esta ruyna y desgracia», «fueron la total ruyna de Troya» (I, ix, 30; xx, 80; xxx, 147; II, xli, 154), y más todavía en Góngora, que lo hace constantemente trisílabo. En conclusión, no es seguro si debemos considerar ruina como voz hereditaria o como cultismo; fonéticamente no puede decirse nada, pues de ser hereditario, roína habría pasado pronto a ruina, y de todos modos me parece artificial la separación que hace M-L. (REW 7431) entre el it. rovina y las formás de los demás romances, considerando hereditario aquél y cultismos los demás; lo más razonable (teniendo en cuenta la -n- del port. y la u -no ou- del fr.) me parece mirar todas las formas romances como semicultismos muy antiguos, sin exceptuar el it. rovina y el cat. ant. y dial. rovina ‘inundación’, ‘tierra de aluvión’ (frente a ruina ‘ruina’); sólo de esta manera es comprensible que esta voz, de arraigo y popularidad ya antiguos, pudiera engendrar el derivado popularísimo ruin. Para otros derivados populares, vid. M. P., Mod. Philol. XXVII, 411-4.

DERIV.

Arruinar [1547, Pero Mejía; Cervantes de Salazar; DHist.; no está en la Celestina, Nebr., PAlc.; Cej. V, pp. 291-2; ruinar, 1555, Laguna; 1599, G. de Alfarache]; arruinador; arruinamiento. Ruinera. Ruinoso [1554, Lazarillo, cap. 2].

Ruin [«la gaha roín e heda», «roín, gaho, envernizo» J. Ruiz, 961b, 992d, pasajes en habla rústica; ruyn, glos. del Escorial, h. 1400; «ruin: pessimus» Nebr.; «ruin sea por quien quedare». J. del Encina, 114; Torres Naharro (V. índice de la ed. Gillet); «a cada paso me anego / por ser la barca tan ruin» C. de Castillejo; «al ruín dadle un palmo y tomaráse quatro» J. de Valdés, Diál. de la L. 37.21; «escapando de los amos ruines que había tenido y buscando mejoría» Lazarillo (cap. IV); más en Cej. V, pp. 287-911, derivado común con el port. ruim y el cat. roí íd.1; la forma primitiva sería *ruino (derivado de ruina, con el sentido de ‘ruinoso, echado a perder’), que pasaría a ruin en apócope proclítica (ruin camino, etc.), y de ahí se generalizaría esta forma en el masculino y en el femenino, única explicación que puede dar cuenta de las formas port. y cat. (que bien parecen ser castizas), y aun de la propia forma cast.2; ruindad [h. 1400, glos. del Escorial; «malignitas» Nebr.]; enruinecer.

1 Sobre todo val., pero en Valencia se extiende hasta el extremo Norte (y más allá), y tiene mayor amplitud semántica que en cast., pues es equivalente de ‘malo’ y del dolent del Principado. Se oye ruí, roín y ruín, y aunque es más común emplearlo como masculino y femenino, también se oye un femenino roïna. Pero cosa ruïna se empleaba vulgarmente h. 1490, según el barcelonés Jer. Pau, quien prefiere ruín cosa (Bol. Acad. B. L., Bna. 1950, 148). Ya es frecuente en los valencianos J. Martorell (Tirant, cap. 100, 329) y Jaume Roig, a. 1460: «una vil hosta, / roýn, disposta / a puteria...», «lo mal criar dels fills fadrins, / que·ls fan rohins, / ben empastats / e viciats», «impiadoses, / malicioses, / dones roýns; / en los camins...» (vv. 3284, 9512, 12583). Alguna vez, aunque es raro, se emplea en el Principado, como voz afectiva, de sentido moral. Comp. ast. roin, roina ‘ruin’ (pero también, en el fem.: roin cosa ‘mala pécora’), V.―

2 Cf. nota breve, vaga y poco informativa de Malkiel, RLiR XXIV, 252n. Con miras a explicar la terminación se podría especular sobre la posibilidad de que naciera de un genitivo estereotipado, en combinaciones como DOMUS, CASA, MURUS, PARIES, CIVITAS <l=lat.>RUզNAEl>, ‘casa, etc., de ruinas, en ruinas’; en valenciano «paret mig derrocada y ruin: parietina» es el único caso en que ya lo hallo en el Thesaurus Puerilis de Onofre Pou, a. 1575 (p. 8); y barca ruin, camino ruin, etc., figuran también entre las combinaciones pronto documentadas.