RIENDA, del lat. vg. *RĔTէNA íd., derivado de RĔTէNRE ‘retener’ (como lo es el lat. cl. RETINACULUM ‘rienda’).

1.ª doc.: Cid.

«El cavallo priso por la rienda», v. 2808; figuradamente: «bien sabié a sus carnes tenerlas so su rienda», Mil. 705d. De uso general en todas las épocas («rienda de freno: habena», Nebr.); renda es forma agallegada en Alf. XI, 1482. Es voz común a todos los romances de Occidente (REW 7261). Para acs. especiales, vid. Aut. y Acad.1.

DERIV.

Rendaje. Arrendar ‘atar por las riendas una caballería’ [Cid; Quijote, etc.]; arrendador o arrendadero ‘lugar para arrendar’ (Aut.).

CPT.

So rienda ‘sometido’ (V. arriba) y luego ‘de poca consideración, inferior’ (Berceo, S. Or. 93, etc.; comp. sorriendo, Cej. IX, § 154); asorrendar (Cid).

1 Nótese la ac. ‘especie de sostén de un árbol frutal’: «reducir... el número de sostenes y riendas que se hace necesario emplear en la mayoría de las especies frutales», en el diario mendocino La Libertad, 21-X-1940.