PINCEL, tomado del cat. pinzell (¿u oc. pinzel?), procedente del lat. PENէCէLLUS, diminutivo de PENէCŬLUS íd., y éste de PENIS ‘pene’, ‘rabo, hopo’, ‘pincel’.
Así en este texto (ed. Solalinde), como en G. de Segovia (p. 83) y en APal. (287
b, 340
b, 352
d) (falta en Nebr.), aparece escrito con -
z-, luego tenía sonora antigua, y esto prueba que ha de venir del cat.
pinzell1 y no del fr. ant.
pincel (hoy
pinceau); también podría tratarse de oc. ant.
pinzel (ej. único, del S. XII, en Raynouard; mal transcrito
pinsel por Levy; la forma
pincèu de Mistral parece estar tomada del francés, pues el tratamiento de la -
C- intervocálica no corresponde ahí a la fonética occitana); pero desde luego el cast.
pincel no puede ser descendiente autóctono de la voz latina, a causa de la pérdida de la vocal final; lo mismo debe creerse del port.
pincel, port. ant.
pinzel, que en parte parece tomado del francés (a no ser que la primera forma sea castellanismo). No hay dificultad en el tratamiento de la
E latina como
i en cat.-oc. y fr.: para éste comp.
rincer RECENTIARE (RETENC-); para el cat.-oc., comp.
dins DE էNTUS,
intrar էNTRARE (con el mismo cierre ante
nz =
ndz que ante las otras combinaciones dentales triples
NTS y
NTR); por lo tanto, es inútil citar
pinicellus y
pinnicellum de algunos textos latinos tardíos, como hace Niedermann [
ASNSL CXIII, 445), pues éstas son meras grafías, propias de la época en que el latín hablado ya confundía la
E átona o cerrada con la
է breve.