PASTINACA, tomado del lat. pastĭnāca ‘zanahoria’, ‘pastinaca (pez)’.

1.ª doc.: Covarr.

Quien describe detenidamente el pez en cuestión; lo mismo hace Huerta poco más tarde en su traducción de Plinio; ya Laguna (1555) emplea el vocablo en el sentido de ‘zanahoria’, mas parece hacerlo solamente en calidad de palabra latina (vid. Aut.). La Acad. suprimió el vocablo en la 1.ª mitad del S. XIX; después volvió a admitirlo definiendo ‘especie de zanahoria’ (1884), definición que en 1914 estaba reemplazada por ‘chirivía’; no sé si esta ac. está bien fundada.

En cuanto al pez ‘Pastinaca marina’ se conocía en Celorio (costa asturiana de Llanes), cuando allí vivía M. Sarmiento en 1721, con el nombre de bastranca (en gallego eixe, ortiga, rayón o raya negra, según los lugares, CaG. 80v, 167r, A16r y p. 188). No tengo otros testimonios de este nombre asturiano (que no figura en los diccs. asturianos, Acad. ni en Lozano), pero Sarm. era entendido en nombres de peces. Parece claramente una forma romance del lat. PASTէNCA, cat. pastanaga, etc., pero el pormenor formal es algo desconcertante, no tanto por la r (que fácilmente se agrega en esta posición) como por la evolución fonética de -INCA; si partimos de -ANACA se comprendería la reducción de -ANA a an en gallegoportugués, pero entonces esperaríamos -anga; si pensamos en un mozarabismo portugués se explica la -C- n muy bien la b- < P- (cf. también BIZNAGA), pero ahí precisamente -ana- debiera conservarse: tendría que ser una forma de la zona costeña central portuguesa, donde las características portuguesas pasarían paulatinamente a coincidir con las arabizantes y las mozárabes. Sólo que entonces es extraño que el nombre fuese ajeno al gallego y no figure en los diccionarios portugueses, y se localice en la parte oriental de Asturias. No habrá relación con el cat. bestina que designa en general los pescados ordinarios.