No parece ser palabra hereditaria, a juzgar entre otras cosas por el tipo de adjetivos cultos que se emplean para distinguir las varias especies de paros; además falta en todos los léxicos anteriores a Aut., y no ha dejado descendencia en los demás romances (a no ser ciertos derivados de PARRA ei dialectos alto-italianos, REW 6251); en latín la variante más conocida es parra, también parrus de suerte que parus quizá no sea más que un; cacografía (comp., sin embargo, Ernout-M.); el nombre popular parece ser herreruelo, aunque éste no se aplica a todas las especies del género paro.