OBÚS, tomado del fr. obus, éste del alem. haubitze íd., y éste del checo houfnice ‘máquina de lanzar piedras’.
1.ª doc.: Terr.; ejs. de González del Castillo (1763-1800) y de Moratín († 1828), en Ruiz Morcuende; Acad. 1843, no 1817.
El fr. obus significaba ‘especie de mortero o cañón’ lo mismo que la voz española; hoy vale ‘granada o bomba de cañón’, pero este significado no aparece hasta fines del S. XVIII. En la segunda mitad del XIX y principios del XX algunos emplean la voz española con este significado, cambio desaprobado por Baralt (1855, ed. 1874) y Saralegui (BRAE 1922, 71-76), y no admitido por la Acad., ni por el uso común. Para el origen de la palabra francesa y la alemana, vid. L. Léger, Journal des Savants 1916, 479; Ant. Thomas, ibid. 525; CVasopis pro Moderní Filologi i Lit. VII (1922), 152ss.
DERIV.
Lancha obusera.