MOSTACHÓN, probablemente del lat. MŬSTACĔUM ‘especie de pastel, hecho con laurel y vino dulce, grasa, harina, anís y queso’; el conducto por el cual llegó el vocablo al castellano es incierto, aunque es probable saliera del it. mostacciuolo por cambio de sufijo.

1.ª doc.: 1618, Espinel (Aut.).

Definido en este diccionario «pasta de mazapán, compuesta de almendra, azúcar y especia; su figura es redonda, al modo de los huevos de faltriquera u bollitos». No figura en diccionarios anteriores; sin embargo, Covarr. da a entender que se empleaba mostacho en un sentido análogo, pero hay que tomar con precaución este dato no confirmado, pues se sirve de él para una de sus etimologías. Hoy sigue siendo palabra viva en muchas partes; lo es también mostatxó en el catalán de Valencia; especialmente lo he oído en el Maestrazgo como nombre de un bollo de bizcocho, hecho con harina, azúcar y huevo (comp. BDLC X, 203). El it. mostacciuolo es «paste dure con mandorle peste, pinocchi, pistacchi, ecc.» (Petr.), «pezzetto di pasta con zucchero, spezie e altro» (Tomm.); se documenta desde Annibal Caro († 1566).

Es difícil poner en duda que se relaciona con el lat. MUSTACEUM, definido arriba según la receta de Catón, voz bien conocida en latín y todavía documentada en un texto vulgar como las Notas Tironianas (ALLG XII, 66). Para la palabra italiana no hay dificultad alguna. En la castellana y catalana falta explicar el tratamiento del grupo C? ; fonéticamente lo más sencillo es admitir que se tomó del italiano, como asegura Aut. Pero llama la atención la diferencia de sufijos y la falta de variantes en -one en Italia y en -ol(o) en España. Si en Italia pudiera documentarse una forma *mostaccio como la que indica Covarr., la dificultad desaparecería, pero el hecho es que aun en los dialectos tenemos el mismo diminutivo que en la lengua literaria: sardo mustazzolu, calabr. mustazzuolu, genov. mostacciolo (Spano, Rohlfs, Casaccia). En realidad no es dificultad muy grande, pues el sufijo pudo cambiarse en España, quizá por adaptación al nombre de otro pastel. Sin embargo, esto hace pensar en la posibilidad de que en España sea palabra de origen mozárabe, lo que también explicaría el tratamiento fonético1. Hay un mustaco «bollo o torta de harina amasada con mosto, manteca y otras cosas», que la Acad. calificaba de antiguo en 1817 (mención quitada posteriormente) y que ha de estar en relación con mostachón y mostacciuolo, pero antes de pronunciarnos sobre esta forma será menester comprobar su exactitud en sus fuentes.

1 A base de la indicación de Covarr. de que un pastel semejante al mostachón también se llama bigote, se podría pensar si nuestro vocablo no deriva de mostacho por una comparación de forma. Pero debería entonces tener figura cilíndrica o prolongada, lo cual no parece ser el caso del mostachón; además, la existencia del pastel llamado bigote no se confirma en otras partes, y lo más probable es que fuese una imitación secundaria y más o menos ocasional del nombre mostachón. El hecho de emplearse pistachos en la fabricación de los mostacciuoli y la inicial del murc. fostachón «bollo pequeño, mostachón» (Sevilla) podrían sugerir que mostachón y congéneres vengan de un ár. *bústaǤ ‘pistacho’, variante de fústaq (< πιστάκιον), que no sería inconcebible según la fonética arábiga, pero el hecho es que esta forma es meramente hipotética; y vale más no pensar en esta conjetura aventurada y además innecesaria: la forma murciana puede explicarse como alteración de un disimilado *bostachón, con el paso frecuente de b- a f- tras la s del artículo plural.