MORROCOYO, ‘galápago’, del cumanagoto morrokoy íd.
1.ª doc.: morrocoy, 1745, en el venezolano Gumilla.
Friederici, Am. Wb., 431. Lo recoge como voz cumanagota Tauste en 1680 (Cuervo, Ap., § 975). Hoy se emplea morrocoy en Venezuela, morrocoyo en Panamá, Cuba (Ca., 138) y Canarias (Lugo, Pérez Vidal), ambas formas en Colombia y Puerto Rico. Carece de fundamento semántico, morfológico e histórico la opinión de F. Ortiz de que es derivado de morro.