MARACA ‘calabacín lleno de piedrecitas, empleado como instrumento músico’: en los países septentrionales de América del Sur se tomó del caribe o arauaco maraka; pero el brasileño maraca y el rioplatense maracá proceden de la correspondiente forma guaraní (mbaraká).

1.ª doc.: 1745, Gumilla, con referencia al Orinoco.

Este autor dice que lo inventaron «los arauacas». Pero el vocablo se encuentra con gran frecuencia desde h. 1520 en autores latinos, alemanes, franceses y portugueses, con referencia al Brasil o a la costa Caribe. Hoy está arraigado en Colombia1, Venezuela2, Puerto Rico (f. Abad), Cuba, el Brasil, y la expansión de la música tropical le ha dado recientemente gran extensión; en el Río de la Plata dicen maracá. Vid. Friederici, Am. Wb., 392. Es poco probable que MARIMBA se relacione con nuestro vocablo.

DERIV.

Maraquero cub. ‘tocador de maracas’ (Ca., 260).

1 «Cantó cierta vez un ‘llorao’ genial, a los compases de las maracas, para infundirme la ironía confortadora», E. Rivera, La Vorágine, ed. Losada, p. 101.―

2 Calcaño. De ahí lo considera propio Cuervo, Ap.7, p. 502.