MANGA, del lat. MANէCA ‘manga (de una túnica, etc.)’, derivado de MANUS ‘mano’.

1.ª doc.: doc. de 1104 (Oelschl.); Berceo, etc.

De uso general en todas las épocas y común a todos los romances. A continuación algunas acs. especiales de interés. ‘Destacamento de soldados o grupo de cazadores’ [Covarr.; Lope, El Cuerdo Loco, v. 2209, dos mangas de piqueros; Pérez de Hita, Guerras C. de Granada, ed. Blanchard, II, 245, una manga de arcabuzeros; hoy muy vivo y generalizado en la Arg., no son más que una manga de locos ‘cuatro imprudentes’; es difícil asegurar si el it. manica íd., SS. XVI y XVII, es padre, hijo o hermano de la voz castellana (vid. Zaccaria)1, que desde luego ha pasado al ár. argelino mánga «bande, troupe, escouade», Beaussier], ac. heredada del lat. MANUS. ‘Obsequio, presente’, ‘trampa, negocio sucio’, explicables por la costumbre medieval de regalar mangas a los que prestaban un servicio, que dió también lugar al it. mancia ‘propina’; vid. Spitzer, RFE XIV, 69-71. ‘Bolsa, saco’, para la cual y para la locución tener la manga ancha, vid. Sarrailh, RFE XXII, 58-60. ‘Espacio comprendido entre dos estacadas que van convergiendo hasta la entrada de un corral’, cub. (Ca., 102), chil., arg. (Chaca, Hist. de Tupungato, p. 295), de donde el frecuente nombre de lugar andino La Manga: en el citado documento de 1104, aparece ya aplicado a un campo y puede tener el mismo sentido.

DERIV.

Mangado [Nebr.]; mangada; mangajón. Mangote. Manguear. Manguero; manguera [1495, Woodbr.; 1696, Vocab. Marít. de Sevilla]. Mangueta (‘cierto madero de construcción’, 1633, Lz. de Arenas, p. 8; ‘pieza del carro’ en Cespedosa, RFE XV, 267); del cat. manigueta (diminutivo de màniga ‘manga’) se tomó el término náutico idéntico en cast. [1587, G. de Palacio, 148]. Manguilla. Manguita; manguito; manguitero, manguitería. Arremangar [J. Ruiz, 1216c; S. XIV, Regla de los Dominicos, RH VII, 510; Glos. del Escorial; «a.: succingo», Nebr.; G. de Alfarache, Cl. C. IV, 120.8], también remangar [Berceo, Sacrif. 208b; J. Ruiz, 384c, con indicativo algo extraño tras por bien que, quizá explicable por el agobio de la rima; APal. 149d «extrafilatus: el que remangado los ombros saca la mano fuera del sayo»; Leyenda de José, p. p. Guillén Robles, p. 125]; arremango; el cat. arromangar (o arrem-)2 está en desacuerdo con el cat. mànega, pero falta estudiar si es realmente un castellanismo.

Mango [h. 1335, Conde Luc.; «mango de cuchillo: manubrium», Nebr.], del lat. vg. *MANէCUS3, derivado romance de MANէCA>, que en latín designaba ya el gancho de abordaje y en it. tomó además la ac. ‘mango (de cuchillo, etc.)’: es derivado común al italiano (mànico) y a todos los romances gálicos e ibéricos. En los MirSgo. Lz. Aydillo imprimió magarõ para ‘mango o punta del mango de una espada’ en MirSgo. 125.8, palabra que no me es conocida en parte alguna y quizá no esté bien leída, pues hay mãgo (= mango) para el mango de la misma espada dos líneas antes; quizá mãgarõ = mangaron, cf. mangeenlas ‘manganillas, máquinas de guerra’ ibid. 95.32. Mango es hoy lo corriente en gallego y de ahí deriva mangado ‘atado a un palo que sirve de mango’: fouces mangadas en paus Castelao, Esc. Don. 299.17. Mangorrillo; mangorrear «emmancher, mettre un manche», mangorreado «emmanché» (ambos en Oudin); mangorrero [Nebr.]4. Desmangar. Desmangorrear. Enmangar. Maniquete [Acad. 1884], del it. manichetto íd., diminutivo de manica ‘manga’. Gall. maniquetas = mitones ‘especie de mangas para brazos y piernas’ (Sarm. CaG. 114v, 214v), parece un término de moda, derivado del it. manica.

CPT.

Mangajarro.

1 También lomb. y venec. mánega.―

2 Arremanguat se halla ya a primeros del S. XV, Joan, Pere i Arnau Marc, p. 69, p. p. A. Pagès; arromangat en el Tirante. Hoy la forma con o es general en el País Valenciano, Mallorca, Menorca, prov. de Tarragona, y comarcas de Las Borjas Blancas, Lérida y Balaguer; arrem- en el resto del Principado (ALC, 160; BDLC XIII, 183; Dicc. Alcover).―

3 En el REW 5303a, va sin asterisco, pero no sé que esté documentado.―

4 Sobre todo en el refrán o frase proverbial «en casa del herrero, cuchillo mangorrero», que ya se halla en Covarr., y sigue vivo en Chile (Canobbio) y en muchas partes. Del vasco makur «faux, contrefait», mokor «hargneux, pervers, difforme», malkor «stérile», deriva Rohlfs (BhZRPh. LXXXV, § 45) el gascón bigordano magorro «femelle stérile qui ne prend jamais». Debe tomarse en consideración la posibilidad de que de ahí salga mangorrero, que Aut. define «lo que anda comúnmente entre las manos, inútil y de poca estimación», «se dice también del que anda vagando inútilmente». Sin embargo, mientras no se pruebe que ha existido con este sentido *mangorro o *magorro, o por lo menos que mangorrero se ha aplicado desde antiguo a personas, o a cosas que no tienen mango, la idea será problemática. He aquí la documentación, que parece más bien contraria a la idea, aunque cabe suponer que la supuesta etimología mango pueda haber deformado algo las definiciones: Nebr. «mangorrero cuchillo: culter manubriatus», Oudin íd. «un couteau qui a un meschant manche», Covarr. «m. dízese de lo que es ordinario y común a todos, que por andar de una mano en otra vale poco; proverbio: en casa, etc.», Percivale «m. cuchillo: a knife hafted»; además vid. Gillet en su índice a la Propaladia. En la Arg. y en el Uruguay se sustantiva mangorrero o mangurrero para designar un cuchillito ordinario, de uso manual, vid. Malaret, Supl., y este pasaje del salteño J. C. Dávalos: «cada cual sacó de su avío una galleta patria y pronto los mangurreros comenzaron a rebanar bocaditos de carne dorada» (La Nación de B. A., 22-IX-1940). Lo más probable por ahora parece que existiera mangorro en el sentido de *‘mango malo’ y que de ahí saliera cuchillo mangorrero ‘cuchillo mal mangado’. El vasco común mauka ‘manga’ (en Sule mahuka) quizá represente un *MANŬCA (alteración de MANICA bajo el influjo de MANUS, -US). En cuanto a la ac. guipuzcoana y a.-nav. ‘ganga’, ‘ganancia ilícita’ (hacia la cual me llama la atención Michelena, BSVAP XI, 292), se explica por la costumbre medieval de regalar mangas o calzas, a que aludo en este pasaje y a propósito del cast. ant. calzas; desde luego no hay relación con el cast. ganga, de fecha tan reciente (el empleo de entrarse de manga en el mismo pasaje que ganga en Quiñones de B., coincide por casualidad).