MANERA, del lat. vg. MANUARIA, íd., femenino de MANUARIUS ‘manejable’, de donde ‘hábil, mañoso’: el femenino tomaría el sentido de ‘maña’, ‘procedimiento hábil’, y luego ‘modo adecuado de hacer algo’.

1.ª doc.: maneira, doc. de Nájera de 1152; manera en otro de 1209 (Oelschl.).

Manera es voz popular y muy frecuente, en sus varias acs., desde los autores más antiguos: Berceo, Apol., Juan Manuel, Juan Ruiz1. Voz de uso general en todas las épocas, y común a los cinco romances de Francia y de la Península Ibérica (el it. maniera es galicismo, aunque antiguo). No sólo manera no es menos popular y antiguo en los romances ibéricos que en los de Francia, sino que en aquéllos es expresión de uso más general, por no estar sujeta a la concurrencia de sinónimos (como façon, guise, ajeno aquél y menos arraigado éste en España). Luego es imposible admitir con M-L. que en castellano sea préstamo de oc. maniera. Es verdad que en francés antiguo es frecuente junto a maniere el adjetivo manier, -iere, ‘manual’, ‘manejable’ y sobre todo ‘hábil, mañoso’, adjetivo no enteramente ajeno a la lengua de Oc2 y al catalán (Ag.), y maniere en rigor no es más que el femenino sustantivado de tal adjetivo, pero la sustantivación debió de ser antiquísima a juzgar por: el grado de abstracción y generalización que ya había alcanzado el vocablo en los textos más antiguos de todos los romances3, y si en francés se perdió el adjetivo manier desde el S. XIV, la pérdida pudo ser algo más antigua en las lenguas hermanas, que por lo demás no cuentan con literatura tan antigua como el francés; por lo demás, en castellano mismo tenemos otro testimonio de MANUARIUS en el sustantivado manero ‘apoderado, representante’, del cual véanse muchos ejs. en M. P., Cid, y en Oelschl., s. v. mannero y mannería4. Me adhiero, pues, a la negativa que A. Castro (RFE V, 39) opone a tal préstamo, que no creo que nadie admita ya. Tampoco es verosímil el provenzalismo del port. maneira, que se documenta desde el S. XIV (CortesƟo), y creo es tan antiguo como el idioma; y aunque ahí la conservación de la -N- intervocálica sea notable, el mismo caso se presenta en condiciones fonéticas iguales en JANUARIUS > janeiro y en JANUELLA > janela ‘ventana’, de cuyo casticismo no cabe dudar5.

Ejs. de significado más arcaico que el general se hallan ocasionalmente en el iberorromance antiguo: así ‘maña’6 y ‘mesura, moderación’7 en el catalán8 medieval9.

DERIV.

Amanerado [1708, Palomino, DHist.], imitado del it. manierato; amanerar, amaneramiento.

1 Alguna vez tiene el sentido de ‘hechura, forma de un vestido’: así en Nebr. «manera de vestidura: manuarium vestis», pero agregando la ac. general «manera, modo o forma: modus». Pero esta última es la más común desde el principio: de grant manera ‘en alto grado’, Apol., 4b; de fiera manera, S. Dom., 291; en manera de, Mil., 470; «usquequaque: por todas maneras», APal. 538b, «ut... de qué manera», APal. 539b; y docenas de ejs. que sería fácil agregar.―

2 Por lo demás ahí parece ser raro. Levy halla un solo ej. de arcs maniers ‘arcos manejables’; los tres que recoge Raynouard significan ‘domesticado’ y en dos de ellos hay la forma mainier: en realidad ahí tenemos otro vocablo, MANSIONARIUS, comp. amai(s)nar ‘amansar, domesticar’.―

3 Debe de ser palabra muy antigua a juzgar por la gran frecuencia y generalidad de maneria, -eries, en bajo latín: V. muchos ejs. en Du C., entre ellos de Abelardo (princ. S. XII), y de una crónica de Pipino, que supongo italiana del S. IX. He aquí otro en texto de un judío catalán del S. XII (Abraham Ben Hia): «si fuerit hic quidem liber a malis fortis et fortunatus, perveniet res illa ad meliorem perfectionem quam aliquid illius maneriei» (ms. 10009 de la Bibl. Nac. de M., fº 28, , a).―

4 En textos más tardíos sufre el influjo de maña tomando ñ, pero en el Cid, 1.ª Crón. Gral. y varios docs. de los SS. XII-XIV tenemos la variante con n.―

5 Tiene algo de espinoso este problema, pues no es convincente postular formas geminadas *JANN(U)ARIU, *MANN(U)ARIA, cuando en castellano y catalán no hay formas con ñ. Sin embargo, una pronunciación como *janwéla, *janwéro, pudo subsistir hasta bastante tarde impidiendo así la dilución de la -N-, que ya no era intervocálica, y posteriormente el grupo -nw- se simplificaría perdiendo el segundo elemento, tal como en catalán y gascón-languedociano NOCTEM dió nit, ne(i)t, pasando por nwit, nweit.―

6 «No ha e·l món tan forçor ferre que ab manera no·s puxa amollir», Eiximenis (h. 1385), N. Cl. VI, 33.―

7 «Com totes coses que són ultra manera noguen als hòmens, la pus perillosa cosa és habundància sens mesura», Antoni Canals, de la misma época, Providència, 109.―

8 Claro que la ac. general y moderna ‘modo’ no es menos antigua allí, pues ya hay docenas de ejs. en Lulio (p. ej. Doctr. Pueril, 195, 201, 208, 220, 234, 247, 259, etc.).―

9 Comp. la monografía de Marco Treves, «Maniera, the History of a Word», Marsyas I, 68-88, que no está a mi alcance.