MADRUGAR, del antiguo madurgar y éste del lat. vg. *MATȢRէCARE, derivado de MATURARE ‘hacer madurar’, ‘acelerar’, ‘darse prisa’; de esta última ac. se pasó a ‘levantarse temprano’.
1.ª doc.: madurgar, Berceo.
DERIV.
Madrugada [Berceo, vid. arriba]. Madrugador. Madrugón [dar un madrugón ‘abandonar la posada sin pagar’, La Ilustre Fregona, ed. Cl. C., p. 255; Quevedo, etc.; o en general ‘levantarse muy temprano para dejar engañado a alguno’, Aut. y ya en Paravicino, h. 1620, RFE XXIV, p. 315; en Cuba es ‘anticiparse’, pero se usa preferentemente para las malas acciones; para ello y ejs. clásicos, vid. Ca., 35; para el uso en germanía, vid. Hill, Voces germanescas]. Madruguero, and.
1 En la Arg. es muy empleado madrugar como transitivo en el sentido, de ‘anticiparse (a la acción de otro)’: «la sacaba a bailar uno, y a la pieza siguiente... otro; de cuando en cuando intervenía un tercero que los madrugaba antes de empezar la música» (F. Silva Valdés, La Prensa de B. A., 22-IX-1940). Así ya en un entremés anónimo del S. XVII («madrugábalo el aldeano y cómo lo madrugaba», NBAE XVII, 59). Otras veces es ‘sorprender (al enemigo, en una pelea)’: «usté es muy valiente, que siempre ha dado trabajo...―Cuestión de no dejarse madrugar» (Eliseo Montaine, La Prensa, ll-V-1941), y aun ‘destripar, matar’ (Mendilaharzu, La Prensa, 29-IX-1940); comp. A. Alonso, Probl. de la L. en Amér., p. 83. ↩