LEGUA, del lat. tardío LEUGA íd., de origen céltico.

1.ª doc.: orígenes del idioma (Cid, etc.).

De uso general en todas las épocas (Berceo, J. Manuel, APal. 242b, 280d, Nebr., etc.; Cej. VII, § 55), común a todos los romances hispánicos y al galorromance. El latín vacila entre leuca y leuga, pero esta, forma está mejor documentada, pues se halla en inscripciones, y también en Gregorio de Tours y en San Isidoro de Sevilla (Etym. XV, xvi, 2); ahí los mejores manuscritos traen leugas, pero B, K y T escriben leuvas. La misma forma se halla en los Getica de Jordanes (S. VI), KJRPh. XII, 65. Luego parece que la G tras ? se labializó pronto y en seguida desapareció (acaso ayudando la lenición céltica), de donde finalmente el paso de LE?A a legua, como WARDAN a guardar, o germ. TREUWA a tregua; comp. port. légoa, cat. llegua, oc. lega, y por otra parte ags. lêowe. Esta explicación fonética es menos hipotética que la que supone una inversión LEUCA > *LECUA, no documentada en parte alguna. Todavía en la Gr. Conq. de Ultr. (h. 1300) leemos lehua (p. 349); y en catalán antiguo (Lulio, Meravelles II, 39, 112; Senescal d’Egipte, N. Cl., 150) y dialectal se lee lleuga (forma que no puede venir de LEUCA, comp. oca AUCA). Michelena, BSVAP XII, 367, llama la atención hacia la forma vasca lekoa documentada en Leiçarraga, que junto con el mozárabe invita realmente a creer en una base antigua en -CUA, aunque agrega que tal vez no suponga necesariamente un lat. LECUA en vista de casos de ensordecimiento como a.-nav., guip. okendu, ukendu, ‘ungüento’, suletino ünküntü ‘perfume’. En mozárabe por cierto el lécua o lícua de Pedro de Alcalá podría favorecer la interpretación tradicional, pero hay que contar con una arabizadón del fonema g (ajeno al árabe) en q, según ocurre otras veces (ƫ ‘godo’, ɊaraqúɊƫa CAESAR AUGUSTA). Es de notar la falta de diptongación en castellano frente al fr. lieue; aunque conocemos mal el timbre de las vocales en los dialectos del céltico continental, hay indicios de que la Ĕ era cerrada en celtibero (vid. LÉGAMO); aunque también cabe la posibilidad de que el cast. legua sea un semicultismo, pues LEUGA (LEUCA) llegó a ser vocablo oficial y muy difundido en el latín tardío y en la alta Edad Media; también es posible una disimilación de semivocales: liegua > legua. Comp. FEW V, 262; Walde-H., s. v.

DERIV.

Leguario.