JARRA, tomado del ár. Ǥárra íd.
Como observa Neuvonen (p. 171) no hay otros ejs. en el S. XIII, y como los mss. del
Calila son posteriores, cabría sospechar una interpolación; pero se halla también en Juan Manuel (
Conde Luc., ed. Knust, 290.22) y en catalán
jarra y
gerra son frecuentes desde el S. XIII (aquél en la Reva de Perpiñán, a. 1284,
RLR IV, 375; de éste hay muchos ejs. en el
Consulado de Mar, Costumbres de Tortosa, etc.). Creo, pues, que es justa la fecha del S. XIII en castellano. Palabra frecuente y de uso general en todas las épocas, común con el port.
jarra y cat. ant.
jarra. De España pasó el vocablo a oc. ant.
jarra [3.
r cuarto del S. XIII], fr.
jarre [1449], it.
giarra [S. XVI: Zaccaria]. En catalán predomina la variante
gerra, que existe también en el Norte de Portugal [Montecarmelo, 1767] y en Galicia, y que se explicará por una pronunciación dialectal diferente en el árabe hispánico (comp. las vacilaciones en la pronunciación de la
a arábiga junto a
r notadas por Tallgren,
Homen.
a M.
P. II, 707, y Neuvonen, 269, líneas 7-8; trataré de esta cuestión en mi
DECat.)
1.
Garra es palabra general en el árabe de todas las épocas, también documentada en el de España por R. Martí.