HUÉSPED, del lat. H֊SPES, -էTIS, ‘hospedador’ y ‘hospedado’.
1.ª doc.: Cid.
DERIV.
Huéspeda [doc. de 1057, vid. Oelschl.]. Hospedar [Cid, Berceo, etc.], de HOSPէTARI ‘hospedarse’ (sólo conservado en castellano, portugués y rumano); hospedado ‘huésped, alojado en casa de alguien’ [Cid]; hospedable; hospedador; hospedaje [APal. 198b], el Cid y Berceo emplean en este sentido hospedado m., Calila (39.680) ospedadgo y Nebr. ospedamiento; hospedante; hospedero [hospedera, en un fuero de 1095, Oelschl.; -ero, h. 1600, Nieremberg]; hospedería [Nebr.]. Hostal [Sta. M. Egipc., vv. 46, 150; Berceo, S. Mill., 27; Mil., 57c; doc. de Sahagún, a. 1232, Staaff 11.4, 6, 9 y passim; Elena y María, RFE I, 57; Alex., 315, 376, 2244; J. Ruiz, 1553c; fuera de Aragón2 se anticuó ya en la Edad Media: falta en APal., Nebr. y en los diccionarios del Siglo de Oro, excepto Covarr., que advierte, sin embargo, que «en castellano» se dice mesón], tomado de oc. ant. ostal ‘posada’, ‘casa’, procedente del lat. HOSPէTALE ‘habitación para huésped’; es probable que lo introdujeran los cluniacenses para los albergues de peregrinos y residencias monásticas (así en el citado doc. de Sahagún); podría venir también del cat. hostal, pero no es verosímil, pues éste significa solamente ‘posada’, y aunque esta ac. se halla en castellano (así o ‘albergue’ en Sta. M. Egipc., J. Ruiz, etc.), es tanto o más frecuente que valga meramente ‘casa’, como en lengua de Oc (así, por ej., en Mil., 57c; Elena y M., Alex.); en todo caso no es palabra autóctona en cast., como lo muestra la síncopa de la vocal interna, conforme a la del cat.-oc. (h)oste y en desacuerdo con la conservación de la misma en huésped; hostalero [Berceo; vivió por más tiempo que hostal, pues se halla todavía en Oudin y en boca de Don Quijote, si bien quizá por afectación de arcaísmo caballeresco], más tarde hostelero, por influjo del fr. hôtelier; hostalaje [J. Ruiz, 1072], a veces la variante afrancesada hostelaje; del mismo origen es el port. estalagem ‘posada, hostería’, ‘cortijo’, de donde el cub. estalaje ‘establecimiento de agricultura, industria y granjería’ (Pichardo). Hostería [1517, T. Naharro; C. de Castillejo; 1547, Pedro de Salazar, desaprobado como italianismo por D. Hurtado de Mendoza; Boscán, al traducir a Castiglione, C. de las Casas y Minsheu lo evitan todavía como palabra extranjera sustituyéndola por mesón: Terlingen, 320-1], introducido del ít. osterìa por los soldados del ejército de Italia; en italiano es derivado del antiguo galicismo it. oste ‘posadero’. Hotel [1855, desaprobado por Baralt; Acad. 1899], del fr. hôtel íd., y éste del citado lat. HOSPITALE; hotelero. Hospital [spital, doc. arag. de 1154, Oelschl.; ospital, Berceo, J. Manuel; «espital de pobres mendigos: proseucha; espital de enechados: orphanotrophium», Nebr.; espital ast., V], duplicado culto del anterior; hospitalario [Acad. ya 1817, aplicado a los caballeros de los órdenes; ya 1869, ac. general]; hospitalero [ant., ‘caballero de la Orden de S. Juan del Hospital’, 1228, M. P., D. L., 87.24; Gr. Conq. de Ultr., 483]; hospitalería; hospitalicio; hospitalidad [h. 1640, Fr. L. Muñoz]; hospitalizar. Hospicio [espiçio, h. 1310, Vida de S. Ildefonso, 19; ast. espiciu, V], tomado del lat. hospĭtĭum ‘alojamiento’; hospiciano. Inhóspito; inhospitalario; inhospitalidad.
1 La ac. ‘hospedado’ puede atenuarse ocasionalmente hasta convertirse en ‘invitado (a una fiesta)’, p. ej.: «¿No preguntáis al marqués / por las güéspedas que tuvo? / FILIPO: Ya vi quán galán estuvo, / puesto que siempre lo es», Lope, El Marqués de las Navas, v. 902.― ↩
2 Allí se conservó maestre de hostal, como nombre de un dignatario de la casa real aragonesa. ↩