HULLA, ‘carbón de piedra’, del fr. houille íd., de origen valón, que parece procedente de un fráncico *HŬKէLA ‘terrón’, emparentado con el neerl. heukel ‘montón de heno’.

1.ª doc.: Terr.; Acad. 1869, no 1843.

Para este origen véanse las investigaciones recientes de Warland, Bull. du Dict. Wallon, XVIII, 117-28, y Haust, Rom. LXII, 532-3, que anulan los trabajos anteriores de este mismo autor; en éstos partía del a. alem. ant. skolla ‘terrón’ (alem. scholle), con un tratamiento fonético de la inicial, propio del valón moderno, pero las grafías liejenses hulhes, hulles, de 1278 y 1295, prueban que la h- inicial es antigua y anulan por lo tanto aquella posibilidad. En la actualidad houyot, houyê,: sigue significando en aquella región ‘copo de nieve’ y otras ideas derivadas de la de ‘terrón’, y el valón hotchèt ‘terrón’, ‘bloque de carbón fósil’, supone también una base *HUKK-, que debe estar emparentada con el citado *HUKILA. No parece posible partir del lat. ĶLLA ‘olla’, como sugería Sainéan, Sources Indig. I, 306-7.

DERIV.

Hullero.