HUESTE, del lat. H֊STIS ‘enemigo, especialmente el que hace la guerra’, que en latín vulgar tomó el sentido colectivo de ‘ejército enemigo’ y después ‘ejército en general’.

1.ª doc.: ueste, Cid, y vid. Oelschl.

También Berceo, Fn. Gonz. (473), Alex. (1859, 2102, oste O 54), etc. General en toda la Edad Media («ueste de gentes: exercitus», Nebr.) y común a todos los romances, en el sentido vulgar. Éste es frecuente desde princ. S. VI (Eteria, San Avito, en éste en plural y aplicado al ejército amigo)1; el cambio nacería por un empleo semejante al actual, cuando hablamos colectivamente del «enemigo», refiriéndonos a su ejército. En la nueva ac. el vocablo se hizo femenino casi en todas partes, aunque en francés antiguo es todavía masculino muchas veces (ASNSL CXXXIV, 139-43). En castellano toma a veces la ac. ‘campamento o real donde asienta un ejército’ (Gr. Conq. de Ultr., 505). En el S. XVI queda anticuado, como observa Juan de Valdés2, aunque todavía lo emplean autores arcaizantes como Mariana y alguna vez Calderón; lo mismo que hoy, los académicos de Aut. anotan que sólo se emplea en plural, para designar las tropas.

DERIV.

Hostil [Mena; APal. 198b, pero es dudoso que ya estuviera en uso, pues imita una frase latina, Fr. L. de León (C. C. Smith, BHisp. LXI); falta Covarr.; 1691, M. de la Parra], tomado del lat. hostīlis ‘enemigo, hostil’; hostilidad [1631, Céspedes]; hostilizar [Aut.]3.

1 La ac. romance se halla también en el Capitulare de Villis (h. 800), ZRPh. XXXVII, 538, y en muchos textos tardíos (Souter, etc.).―

2 «Hueste por exército... ya no lo usamos sino en aquel refrán...: Si supiesse la hueste lo que haze la hueste» (Diál. de la L., 108.15).―

3 La Academia rechaza hostilización, que algunos han empleado, vid. BRAE XII, 125-7.