GOFO, ‘necio, ignorante, grosero’, tomado del it. gòffo ‘grosero’, ‘torpe’, de origen incierto, probablemente de creación expresiva.
1.ª doc.: 1517, Torres Naharro; Juan de la Cueva, † h. 1610; Góngora.
En cuanto a la voz italiana, son improbables las etimologías germánicas (ZRPh. XLII, 156) y griegas (Diez) que se han propuesto, como observa M-L. (REW 3907), y tampoco es de creer que venga del it. gufo ‘buho’ y sus variantes, como sugiere Sainéan (BhZRPh. I, 113); la misma raíz expresiva reaparece en francés, donde un derivado ya se documenta h. 1340, de suerte que Wartburg (FEW IV, 305) la cree creación paralela y no tomada del italiano.
1 Sin embargo, vid. ahora Régulo Pérez, Rev. de Hist. de La Lag. n.° 78, p. 250, que cita abundante documentación de gofio en los SS. XVI-XVII, con ej. en A. Bernáldez, de hacia el año 1500 o 1510. Ante fecha tan temprana se hace imposible admitir el origen italiano y muy difícil el románico: será, pues, voz indígena, o habría que deducir que el adjetivo gofo era onomatopeya española paralela y no descendiente de la italiana. Más ejs. de gofio en cronistas y poetas canarios de los SS. XVI-XVII cita M.ª Rosa Alonso, El Poema de Viana, 1952, p. 397. Véase también el estudio monográfico de J. Álvarez Delgado, Actas de la Soc. Esp. de Antrop., Etnol. y Prehist. XXI, 20-58. En realidad no parece, aunque Cuervo dé a entender lo contrario, que la forma con i sea adjetivo en parte alguna, pues el venez. gofio sólo me es conocido en el sentido de ‘especie de alfajor hecho con harina de maíz agregándole dulce’ (Rivodó, Voces Nuevas, 86). Luego parece asegurado el origen guanche.― ↩
2 El menorquín gòfies ‘buen bocado’, ‘manjar bueno’, queda muy alejado, y Moll se inclina a creerlo de origen dialectal italiano, de OFFULA, quizá con razón (AORBB III, 33). ↩