GLEBA, ‘terrón’, tomado del lat. glēba íd.
1.ª doc.: Mena (C. C. Smith, BHisp. LXI); 1499, Hernán Núñez.
Empleólo también J. del Encina, pero en ambos autores es cultismo sin arraigo. Oudin traduce gleba o gleva por ‘espiga de trigo’, lo que prueba lo poco conocida que era todavía la palabra por entonces. Aut. dice que «es voz puramente latina». Más tarde trataron algunos de introducir una distinción sinonímica entre gleba y terrón, vid. Terr., que cita la Agricultura de Valcárcel (1765). Siempre ha sido cultismo, a diferencia del port. leiva ‘caballón entre dos surcos’, y el cat. gleva ‘terrón’, que son populares. Acaso a la muerte del vocablo en español contribuyera la homonimia con leva, con el cual hubiera coincidido fonéticamente, de ser voz hereditaria. En Aragón, donde significa ‘terreno cubierto de césped’ (ac. también catalana), parece ser vocablo popular.