FULANO, tomado del ár. fulân ‘tal’.

1.ª doc.: 1155, Fuero de Avilés.

En árabe fulân es adjetivo con el mismo valor del cast. tal (šây fulân ‘tal cosa’), aunque puede también sustantivarse, tal como se emplea en castellano. En el idioma medieval se empleaba también como adjetivo: «por alma de un monge de fulana mongía», Berceo, Mil., 170d; «un pez de los peces de fulana isla... vi un home en fulán logar, que es encantador», Calila, ed. Rivad., p. 75; «descomulga a fulano ome», Partidas I, ix, 33; uso que se anticuó antes del S. XV, en que un corrector del Libro de los Engaños (S. XIII) enmendó fulana tierra en tal tierra. Neuvonen, 199-200. De fulán vendrá quizá el vasco vizc. ulain ‘tal’, Michelena, BSVAP XI, 291. En algún punto de América se hallan usos parecidos a aquella construcción arcaica; así el venezolano Picón Febres escribe «si hay algo desabrido en el mundo es el fulano manjar blanco», y aunque puede sospecharse que ahí tengamos una innovación secundaria, el reaparecer la aplicación de fulano a cosas en Andalucía1 refuerza la sospecha de un arcaísmo. La forma inicial de este extranjerismo fué fulán, que vemos en Berceo, Mil., 736a; Alex., 1832; en fueros de Aragón (Tilander, § 29.1, y p. 429), y todavía en textos del S. XV: don Fulán (rimando con darán) en Villasandino, Canc. de Baena, p. 652, y en la Cuarta Crónica General, escrita h. 14602; por analogía de adjetivos en -ano que podían apocoparse, cuando enclíticos, en -án, se introdujo luego la forma fulano, que se generalizó. El mismo arabismo se ha introducido en portugués fulano, junto al cual existió antiguamente fuão, gall. ant. foan; en aquella forma las consonantes intervocálicas pueden haberse conservado por influjo del árabe, más bien que del castellano, como sospecha Neuvonen. El vocablo permaneció, en cambio, ajeno al catalán. En Aragón hallamos también una variante folén (varias veces en Tilander, l. c.) que corresponde a la pronunciación tardía del árabe vulgar hispánico; análogo a este folén es la forma fulno de tal que he anotado en Castellonroi (zona catalana de Huesca). La forma normal fulân fué vulgar en hispanoárabe sólo en fecha muy arcaica, lo cual es indicio de la gran antigüedad de este arabismo en romance.

1 Se emplea en lugar de una cosa cuyo nombre no se recuerda o no se quiere decir: «dame el fulanillo de la navaja», por el afilador (Toro G., RH XLIX, 457).―

2 «Vedes vos aquel pendón? Es de tal concejo; e aquel otro, de fulán ricoomne», RFE X, 365. Como en la frase paralela, será adjetivo, aunque mal puntuado por el editor.