FRASQUETA, ‘cuadro con que en las prensas de mano se sujeta al tímpano y se cubre en los blancos la hoja de papel que se va a imprimir, a fin de que no se manche’, probablemente del cat. fresqueta, adaptación del fr. frisquette íd., sustantivación del fr. med. y dial. frisquet ‘vivaracho’, ‘coquetón’ (porque la frasqueta sirve para la limpieza y buena presentación de la página impresa), diminutivo del fr. ant. frisque, que se tomó del neerl. frisch ‘fresco’, ‘frescachón, de aspecto saludable’.

1.ª doc.: 1615, Suárez de Figueroa (Aut.).

El cast. frasqueta, cat. fresqueta (Ag.), oc. fresqueto y fr. frisquette designan un mismo enser tipográfico. En francés el vocablo está documentado desde 1584: FEW III, 810b; es probable, por lo tanto, que desde allí se propagara a los otros tres romances, y que en lengua de Oc y catalán sufriera al hacerlo una adaptación a la voz autóctona fresquet (diminutivo de fresc ‘fresco’), que correspondía aproximadamente al sentido del fr. med. frisquet; la forma castellana, en su a, presenta huellas del paso por el catalán oriental (donde e suena como a antes del acento), de conformidad con el hecho de que la imprenta entró en España por la zona de lengua catalana. Para el origen del fr. frisquette me parece convincente la explicación semántica sugerida por Wartburg y reproducida arriba.

Gamillscheg, EWFS, s. v., cree que por el contrario la voz francesa (que él cree documentada sólo desde el S. XVII) viene del español; ahí estaría en relación con «frasquia, regla de madera», para el cual remite a su artículo frasque, donde no hay referencia alguna a tal palabra ni a frasqueta, ni posibilidad semántica de explicar este último; en realidad tal vocablo frasquia no es conocido, y supongo se tratará de fasquía ‘listón de madera en los buques’, sin relación con todo esto.