FRANJA, tomado del fr. frange íd., fr. ant. frenge, y éste del lat. FէMBRէA ‘borde de un vestido’, ‘franja’,
Escrito
franxita el diminutivo aparece ya en el testamento de Fernando de Rojas (en Talavera, prov. de Toledo)
2, a. 1541;
franjuela en el aragonés Calvete de Estrella (1552);
franja en Quevedo, etc. Falta todavía en Nebr. y APal., pero ya está en Covarr. y
Aut. El duplicado
fimbria ‘borde inferior de la vestidura talar’ ha de ser culto, por la conservación de la
F-, y así parecen confirmarlo los ejs. de Lope y de Valverde (1657) que cita
Aut.; el cat.
fímbria es de uso popular y puede ser hereditario. Pero las formas hereditarias de los demás romances presentan todas la metátesis de la -
R- a la primera sílaba, como en francés (oc. ant.
fremnha, rum.
frînghie), fenómeno que es posible venga ya del latín vulgar.
Frange (1677, Pinel), como término de blasón, según
Aut. sería la «división del escudo de armas, hecha con dos diagonales que se cortan en el centro»; a pesar de esta definición, que necesitaría comprobarse, no puede, por razones morfológicas, venir del lat.
FRANGERE ‘cortar’, y se tratará sin duda del fr.
frange, que se emplea efectivamente como término heráldico, y pudo aplicarse a una franja que cruzara diagonalmente un escudo; en cuanto al otro término de blasón
frangle ‘faja estrecha que sólo tiene de anchura la decimoctava parte del escudo’ (1725, Avilés), aquí es la forma, con su -
l- inexplicable, la que está seguramente corrompida.