FALLEBA, ‘varilla de hierro acodillada en sus dos extremos, sujeta en varios anillos y que puede girar por medio de un manubrio, para cerrar las ventanas o puertas de dos hojas, asegurando una con otra o con el marco’, del ár. vg. ȟallâba ‘tarabilla para cerrar las puertas o ventanas’.

1.ª doc.: 1680, Pragm. de Tasas, en Aut.

Indicó esta etimología Eguílaz, 394, con la aprobación de Steiger, Contr., 230. El vocablo árabe sólo está documentado en Marruecos (Lerchundi, s. v. taravilla; falta Dozy, Beaussier, Tedjini, etc.). No tiene documentación antigua ni está clara su explicación semántica dentro de la raíz ȟ-l-b, pues ȟallâba en el árabe común e hispánico (glos. de Leyden) sólo es conocido en el sentido de ‘engaño, falacia’; sin embargo es probable que en nuestra ac. se parta de ȟilb ‘garra, zarpa’, ȟlab íd. y ‘gancho’, y el verbo ȟálab es conocido vulgarmente en las acs. ‘disparar, esgrimir’ y ‘atar’ (Dozy, Suppl. I, 389a). Sea como quiera, el marroq. ȟallâba sería difícil de explicar fonéticamente como hispanismo, y tiene fisonomía semítica, de suerte que no dudo de que es el étimo y no un préstamo de la voz española. En castellano debió de existir una variante antigua *halleba, pues sólo ésta puede explicar el cat. lleba o barra-lleba, ambos sinónimos de falleba, que difícilmente podrían comprenderse como arabismos directos; el primero se halla desde 1816 (Ag.) y ya en el diccionario de Belvitges (primeros años del S. XIX)1; por lo demás, en el Campo de Tarragona, donde se distingue oralmente entre b y v, pronuncian lleva (BDC VI, 46), y en las comarcas de Lérida y Tortosa, así como en todo el País Valenciano, se emplea falleva, pronunciado con v labiodental en las zonas que distinguen los dos fonemas (BDC XX, 159, comp. p. 163), mientras que el mallorquín Amengual da la forma alterada fallepa.

1 Ag. cita además un ej. de lleva en 1491, pero el sentido no está claro y más bien parece tratarse de un homónimo.