ENTREMÉS, tomado del cat. entremès ‘manjar entre dos platos principales’, ‘entretenimiento intercalado en un acto público’, el cual procede, quizá por conducto del fr. ant. entremès íd., del lat. էNTERMէSSUS, participio de INTERMITTEREintercalar’, derivado de MITTERE.

1.ª doc.: Juan de Mena y Alonso de Cartagena, ambos † 1456.

También se halla en las Crónicas de Juan II y de Álvaro de Luna, escritas h. 1460, en la de Enrique IV, que es de 1474-92 y en la de Lucas de Iranzo, de la misma época. En todas ellas tiene el sentido de ‘diversión que forma parte de un acto público y solemne’, p. ej. en un torneo, en la recepción de un príncipe, etc.; podía consistir en una justa en que tomaban parte caballeros, en bailes y cantos, etc.1; en Torres Naharro es ‘divertimiento musical, serenata’, y en Mena toma la ac. secundaria ‘broma, burla’ (Gillet, Propaladia III, 552-3). La primera indicación clara de que tomaban carácter dramático está en un doc. zaragozano de 1487, donde se habla de un entremés de los pastores representado en unos cadalsos; pero el vocablo no quedó fijado en el sentido definitivo de pieza dramática jocosa y breve, intercalada en la representación de una obra seria, hasta med. S. XVI, reemplazando así a lo que se había llamado passo. La otra ac., ‘manjar secundario entre dos platos’, se halla ya en APal. («acaesce saciedad y hartura viendo muchas maneras de entremeses», 435b).

En catalán ésta aparece desde 1381, y la otra se halla ya en Serradell (S. XV o más bien XIV), con gran abundancia desde la primera mitad del S. XV, y ya en 1415 (vid. Ag.; Cotarelo, NBAE XVII, pp. liv-lx; L. Rouanet, Intermèdes Espagnols du XVII.e Siècle, introducción (Cej., Voc.); recuérdese el desarrollo más temprano del teatro en la literatura catalana que en castellano. En Francia tenemos claramente aquélla ya en el Roman de la Rose (h. 1300), y ésta es la que debe figurar ―a juzgar por el contexto― en el poema Gauvain, que parece ser del S. XIII; en cuanto al ej. más antiguo del vocablo, en Marie de France (fines del S. XII), el sentido es aplicación figurada que puede basarse en cualquiera de las dos2. No es, pues, exacto que el sentido ‘hors-d’oeuvre’ sea más antiguo que el otro, y por lo tanto no hay fundamento suficiente para considerar que es compuesto francés de entre y el fr. ant. mès (hoy mets) ‘plato o servicio en una comida’; es más probable que sea el antiguo participio de entremettre (puesto que mis es forma analógica y secundaria) o la continuación del participio del verbo latino correspondiente, INTERMISSUS. La falta de -o en castellano denuncia claramente el vocablo como tomado del catalán; en este idioma no es posible decidir por ahora si es forma autóctona o procedente de Francia; desde luego debe rechazarse la idea de que alguno de estos vocablos venga del it. intermezzo.

DERIV.

Entremesear, antiguamente entremesar [1605, López de Úbeda, p. 93a (Nougué, BHisp. LXVI)]. Entremesil. Entremesista.

1 Así todavía en una pieza de la escuela de Juan del Encina, publicada en Valencia en 1537: «O qué altas alamedas / llenas de avezitas ledas / que cantan sus entremeses», Rennert RH XXV, 292. Análogamente en APal. 370d y en otro pasaje.―

2 Hablando de una cena se dice: «un entremés i out plenier, / qui mout plaiseit al chevalier: / kar s’amie baiseit sovent / e acolot estreitement», Lai de Lanval, v. 185. Para otros ejs. vid. God. IX, 488-9. La de ‘entretenimiento, diversión’ se halla todavía h. 1600 (Pasquier), pero es arbitrario decir con Gamillscheg que no aparece hasta esta fecha, pues el corto trozo de Gauvain que cita God. basta para ver que no se trata de un manjar («A un vallet a li rois dit / que il voist l’entremes haster»). Hay además otros ejs.