ENEBRO, del lat. vg. JէNէPĔRUS (lat. JȢNէPĔRUS) íd.
Está también, h. 1400, en los Glos. del Escorial y de Toledo; en Nebr.; etc. J
INIPERUS figura en el
Appendix Probi, y se deduce de la grafía
inipyrus de un glosario (
CGL V, 303.22); se explica por una especie de asimilación como la de los casos reunidos por M-L.,
Einf., § 119; de la misma forma proceden todas las romances, sin excluir el vasco
ipuru ni el port.
jimbro,
zimbro <
*jĩbro <
jĩebro, ya documentado por la grafía
zimbrus del glosario latino-arábigo del S. XI, pp. 289, 550
2; de ahí el salm. (
en)
jimbre,
enjuimbre,
enjumbre; Unamuno recogió en Villarino y otros pueblos de dicha provincia
joimbre,
j(
u)
imbre,
jumbrio (García Blanco,
U. y la Lengua Esp., 1952, p. 41). En Álava corre la variante aragonesa
jinebro. Más variantes locales en
GdDD 3630. La forma
junípero, registrada modernamente por la Acad., no es propiamente castellana, sino mera adaptación innecesaria de la forma latina.
Ginebra [Acad. 1817, no 1783], del cat.
ginebra íd., que no es más que una mala grafía de
ginebre, m. (de pronunciación idéntica), ‘enebro’, por las bayas de esta planta que se emplean en la fabricación de dicho licor; del fr.
genièvre [1793] procede el arg. vg.
giñebra [
Martín Fierro I, 1186;
Fausto de E. del Campo, v. 192]. Me ocuparé de la explicación de la
ie francesa (mal explicada en el
FEW V, 76) en mi
DECat.