DUNA, del neerl. duin (antiguamente dûnen) íd.

1.ª doc.: 1643, Varén de Soto.

Aunque este autor y Aut. indican que se tomó durante las Guerras de Flandes, es posible que no se hiciera directamente, sino por conducto del francés, que a menudo emplearían los flamencos para entenderse con los españoles. En francés el vocablo se halla desde el S. XIII, pero es de origen neerlandés, aunque en este idioma viene quizá del céltico (Mahn, Etym. Untersuch., 30-31; Franck, s. v.). La vieja palabra española, todavía muy empleada en la Arg., Chile y otras partes, es MÉDANO.

DERIV.

Duneta ‘la estancia más alta de la popa del navío’ [Tosca, princ. S. XVIII, Aut.; Acad. ya 1843], del fr. dunette [1634] íd., diminutivo del anterior (FEW III, 180a).