DEJAR, alteración del antiguo lexar, procedente del lat. LAXAREensanchar’, ‘aflojar, relajar’, derivado de LAXUSflojo, laxo’.

1.ª doc.: laiscare (= laଖšare), S. X (Glosas Emilianenses y Silenses); lexar(e), 1055, doc. de Santander1; dexar, h. 1200 (Auto de los Reyes Magos; doc. de Tórtoles, 1200; dessamos en doc. de Burgos, 1201: Oelschl.)2.

Para formas arcaicas, Tailhan, Rom. IV, 262-4; M.P., Oríg., 93-95; Oelschl. Para construcciones y acs. del verbo, Cuervo, Dicc. II, 849-67; Cej. VII, § 46. Formas semejantes con d- se hallan en port. deixar, cat. deixar3, gasc. dechà (BhZRPh. LXXXV, § 174), langued. deichà, daissà, sic. dassari, calabr. merid. y centr. dassare, logud. ant. dassare4, mientras que los demás romances conservan la l- (oc. laissar, fr. laisser, it. lasciare, etc.). Esta diferencia fonética condujo a Diez a derivar dejar del lat. DESէNĔRE íd.; la idea hubiera podido defenderse fonéticamente, aunque con gran dificultad, a base de partir del pretérito clásico DESէI (comp. desisset ‘abandonase, renunciase’ en Petronio, LXVIII, 6). Pero después del estudio de Tailhan, basado en el examen de un millar de escrituras, resultó evidente que si la forma general en España fué lexar hasta h. 1200 y sólo desde entonces dexar, ésta debía ser alteración de aquélla, y, por lo tanto, se debía desechar DESINERE.

Prescindiendo de otras explicaciones increíbles5, se han sugerido varias ideas aceptables, aunque dudosas, para explicar esta alteración. M-L., REW 4955, partiendo de la observación de Ascoli, AGI XII, 24-27, de que en Piverone sólo se emplea una forma con d- (dasa) en el imperativo, mientras el resto del verbo tiene l-, se inclina a creer que la oposición entre da o lascia = da o deja, pudo ser causa de la extensión de la d- del primer verbo al segundo. Acerca de la posible influencia de dar en el cambio de lexar en dexar, V. asimismo Spitzer, AILC III, 13, donde también se refiere a la teoría que rechazó en la nota 5. Schuchardt, ZRPh. XV, 241, y M. L. Wagner, ZRPh. LXII, 70ss., admiten un cruce entre LAXARE y DELAXARE; este último existió efectivamente en el castellano arcaico (delexar, doc. de 1198, 1206, 1218, 1235, en M. P., D. L., 262.92, 266.10, 14, 15, 327.27, 277.10; docs. leoneses de 1236 y 1245, en Staaff, 15.27, 26.44; etc.). Pero me parece difícil admitir un cruce entre un verbo y su derivado, que todos debían percibir como tal, y un cruce limitado a la consonante primera del vocablo. Como por otra parte la oposición entre da y deja no es muy frecuente, me inclinaría mejor a admitir la primera explicación de Ascoli, AGI XI, 117ss., que consideraba dexar como mero descendiente de DELAXARE, contraído por la pronunciación rápida que es propia de esta clase de verbos casi-auxiliares: luego se trataría de una mutilación fonética del tipo de las que sufrieron las palabras AMBULARE (> andar, anar, aller) o CONSOBRINUS (>cousin, sobrino). Sin embargo, como el cambio de lexar en dexar es evidentemente solidario del que sufrió levantar cambiado en devantar, si bien con menor extensión6, y como la alteración se produjo en fechas diversas en portugués, catalán, lengua de Oc, Cerdeña y Sur de Italia, países donde hasta ahora no conozco huellas de DELAXARE, sería preferible hallar una explicación que no dependiera de este verbo. ¿Deberemos pensar en un influjo de la preposición de, en la construcción tan frecuente dejar de hacer algo7, con anticipación de la d gracias a la pronunciación rápida y relajada del verbo auxiliar?8. El duplicado culto laxar figura ya en Aut.

DERIV.

Deja. Dejación [1575, Marmolejo, Hist. de Chile, p. 200b (Nougué, BHisp. LXVI)]. Dejada. Dejado, dejadez; desdexáu ast. ‘negligente, perezoso’ (V). Dejador. Dejamiento. Dejante que ‘además de que’, ‘no obstante que’, en Colombia, Chile, Guatemala y el Oeste Arg. (San Luis y Mendoza; Malaret, Semánt. Amer., 83), no es alteración fonética de no obstante (n’ojtante, disimilado en *dojante), como podría pensarse, sino derivado de dejar, comp. con el mismo valor dejado que en un entremés anónimo del S. XVII (Cotarelo, NBAE XVII, 57); y para la terminación, las locuciones salvante9 ‘salvo, excepto’ (en el Poema de Yúcuf, en la trad. portuguesa del Libro de Buen Amor, RFE I, 171), zafante ‘excepto’ en varios países americanos, passante disto, tirante disto, enchentes disto ‘además de esto’, en el Norte de Portugal (Leite de V., Opúsc. II, 105, 377; Philol. Mirand. I, 367 n.). Dejativo. Dejo. Derivado del arcaico lexar es el ant. leja ‘manda’, en Aragón ‘tierra que queda en una orilla al cambiar el curso del río’, en Murcia y Almería ‘vasar, anaquel’ (< cat. lleixa íd.), también aleja (con inaceptable etimología arábiga en el DHist.). Laja ‘traílla: cuerda o correa con que se lleva el perro, atado, a las Cacerías’ [laxa, 1512, Cuestión de Amor; Oudin, 1607; Rodríguez Fresle, princ. S. XVII], colomb. ‘cuerda de cabuya torcida’, tomado del fr. laisse ‘traílla’ [h. 1200], derivado de laisser ‘dejar’ porque la traílla sirve para dejar cierta libertad de movimiento a los perros (Cuervo, Disq. Filol. II, 159; FEW V; 222a y n.4). Endejas [falta aún Acad. 1899], ‘cada una de las partes que se dejan sobresalientes en un edificio para que al continuar la obra quede todo bien enlazado’ (pero el prefijo en- no se explica claramente: ¿tal vez cruce con una variante *endaraja del sinónimo adaraja?). Relej [h. 1580, A. de Morales] o releje (Cej. VII, § 46): tomado del cat. relleix ‘cornisa o resalte en una pared, etc.’, derivado del cat. ant. lleixar ‘dejar’; relejar. Derivados de laxar: laxación, laxamiento, laxante, laxativo [h. 1440, A. Torre (C. C. Smith, BHisp. LXI); 1555, Laguna]. Relajar [-xar, 1454, Arévalo, Suma, p. 300b (Nougué, BHisp. LXVI); h. 1530, Ant. de Guevara: Cej. VII, p. 253], de relaxare íd.; relajación [S. XV, Aut.]; relajador; relajamiento; relajante; relajo cub., mej. ‘desvergüenza’, ‘sensualidad’, ‘despreocupación’. De laxus, por vía culta, viene laxo [Acad. S. XIX], con sus derivados laxitud, laxidad, laxismo, laxista.

CPT.

Dexaprén ant. [h. 1280, Gral. Est. 305b5], como el port. ant. leixa-pren ‘artificio poético consistente en empezar una estrofa con la palabra o frase que termina la anterior’, tomado de la frase oc. ant. laissa e pren ‘deja y toma’.

1 La forma con l- se halla hasta med. S. XIII: lexa, en doc. leonés oriental, Staaff, 26.35; lexo, lexe, en doc. de Calatrava, 1239, M. P., D. L. 279.15, 29. En Berceo se hallan promiscuamente lexar y dexar. Ambos también en Alex.―

2 Dexar en el Cid puede ser forma modernizada por Per Abbat. El desse poncat de las Glosas de Silos, n.º 1, traducción de deponat, no contiene el verbo dexar, como cree Oelschl., pues la e sería anacronismo flagrante. Es de se ponga = se deponga, con tmesis; esta explicación, que daba en su cátedra el maestro M. P., está fuera de dudas. A med. S. XIII los ejs. abundan doc. leonés oriental de 1245, Staaff, 26.45; etc.―

3 Ahí el antiguo (l)lexar es general en los SS. XIII y XIV; dexar se halla en Jaume Roig, a. 1460 (p. ej., v. 3263), pero todavía Joanot Martorell, entre 1460 y 1470, vacila entre lexar y dexar. Para el portugués la afirmación de Leite de V. de que deixar no aparece hasta el S. XVI (G. Viana, Apost. I, 362, dice que no «prevalece» hasta entonces) está contradicha por un ej. de 1209 hallado por CortesƟo (citas de Nascentes). Algo parecido debió de ocurrir en catalán.―

4 En el Condaghe de S. Piero di Silki (h. 1150), 32, 43, 96, 189, por lo tanto no puede ser forma influída por el catalán o español. Quizá también adassare en el Condaghe de Trullas (SS. XII-XIII). Hoy la forma italianizante lassare ha predominado en la isla. Vid. M-L., Wien. Sitzungsber., CXLV, v., 64; M. L. Wagner, VRom. V, 135.―

5 Schürr, RF LIII, 27ss., piensa en influjo del verbo ár. Ǥan ‘permanecer, quedar’ Nicholson, RFE XIX, 279, propone DECESSARE (!). Véase, por otra parte, Rice, HispR. VI, 4.―

6 Aparece una decena de veces en la Crónica Rimada del Cid, 2.ª mitad del S. XIV (ms. del XV), citas de Cornu, Rom. IX, 133 (no en el Poema del Cid, como ha dicho alguien), y en textos aljamiados sin duda aragoneses. Devantadizo se halla en un inventario aragonés de 1378, BRAE IV, 216, n.º 31, y hoy se dice devantá(r) en Echo y Ansó (RLiR, XI, 165; ASNSL CLXVII, 251), y en otros puntos de Aragón (parte de estas citas en Cuervo, Obr. Inéd., 59).―

7 Ya lexar de amar en el catalán del S. XIII (Lulio, Meravelles III, 128, p. ej.).―

8 Así podríamos explicar también devantar por levantar de allí, etc. Hallo también un diverare por liberare en el Laudario dei Battuti de Módena, a. 1377 (BhZRPh. XX, 87), que difícilmente podría explicarse así. Pero ¿no será errata, en vista de que el editor, Bertoni, no comenta en absoluto esta forma?.―

9 No es improbable que el modelo de todos estos casos se halle justamente en salvante, que se halla también en catalán literario antiguo y moderno, con el mismo valor (salvant). Como este uso de un participio activo es bastante extraño, quizá se trate de un gerundio apocopado (salvand que, salvand la…, de donde salvant y salvante).