CUY, ‘conejillo de Indias’, origen incierto, probablemente onomatopéyico.
Hoy es voz empleada en el Perú, Chile, el Plata
1, Ecuador, Colombia
2, Venezuela y Panamá; en Tucumán se oye la variante
coy (Carrizo,
Canc.
de Tuc., glos.), en Honduras
cuyo, en Andalucía
cuin (Acad., falta todavía 1899), en Puerto Rico
cuico (Navarro Tomás,
Esp.
en P.
R., p. 151). El plural
cuises está muy generalizado en la Arg. y se llega a oír un singular analógico
cuis. Los primeros escritores que lo mencionan se refieren al Perú; Lenz y Friederici están de acuerdo en que viene del quichua
kkuwi (como forma quichua básica da Lira
kkówi, con variantes
kkówe y
kkúwí), que ya está en Gz. de Holguín (1608), pero la variante portorriqueña, y la presencia del vocablo en Panamá, Honduras, Puerto Rico y Andalucía, son desfavorables al origen quichua. También Lizondo (s. v.
coy) cree que será voz importada en quichua, teniendo en cuenta que Fz. de Oviedo ya mencionaba los
coríes en 1527. Vasco guip.
akuri «cobaya o conejillo de Indias» (Michelena,
BSVAP X, 383; Azkue), en el cual la inserción de -
r- habría podido explicarse por el vasco, pero
corí ya está en Fz. de Oviedo. Bertoldi,
NRFH I, 143, explica el vasco
kui ‘conejo’ por una etimología ibérica bastante seductora. Sería, pues, vasquismo en América. Quizá. O más bien hay coincidencia casual. Es probable que se trate de una imitación del grito del animal, y que en este sentido haya parentesco elemental con
cuino ‘cerdo’ (usual en Méjico: R. Duarte; Acad. sin localización, falta todavía 1899; Sajambre
cuin(
o) ‘cria del cerdo’, Cabranes ‘voz para llamarlo’, Fdz. Gonzz.,
Oseja, 242), y con otras denominaciones del
cuy, como
COBAYA,
cavia (Andrés Bello)
3, nombre científico del animal,
corí (nombre antillano usado por los primeros historiadores de Indias; de aquí el cub.
curiel),
acure (Venezuela: Picón Febres),
acutí (Río de la Plata: Granada).