CUANTO, del lat. QUANTUS íd.

1.ª doc.: orígenes del idioma (Glosas de Silos; Cid; etc.).

Para construcciones, variantes y significados, vid. Cuervo, Dicc. II, 641-663. Indico algunos pormenores más. Cuanto que, cuantos que, en lugar de cuanto(s) seguidos inmediatamente del verbo, es construcción muy frecuente en el Cid, Berceo, y en muchos textos del S. XIII, sigue empleándose alguna vez en obras posteriores (sepan todos cuantos qui esta carta verán, texto aragonés de 1301: RFE XVIII, 228; vulgar en la Arg.: acabar con cuanto bicharraco que Dios ha creado: J. B. Lagomarsino, La Nación, 21-VI-1942). En cuanto ‘mientras’, vid. Pietsch, Homen. a. M. P. I, 45-47. Cuanto a ‘en cuanto a’, muy frecuente en todas las épocas (G. de Alfarache, Cl. C. II, 219.24, etc); para su abuso en Juan de Valdés, vid. Cotarelo, BRAE VII, 281. Con el mismo valor empleó este autor cuanto que (quanto que yo, no os sabría dar más que una noticia confusa, en Diál. de la L., 39.12). Cuanto por ‘en cuanto, luego que’, en el Amadís y hoy en la Arg. (Cuervo, Ap.7, p. 264; M. Fierro I, 501, 859, 1511, etc.; Tiscornia, BDHA III, 198). Y otros cuantos ‘y algunos más’ (ej. de Mz. de la Rosa en Cuervo, o. c. 660a; del propio Cuervo en sus Ap.7, p. 172; etc.). Cuanto y más por ‘cuanto más’, vid. Cuervo, 658b-660a; y agreguése Tirso, Vergonzoso I, 509; La Prudencia en la Mujer I, xiv, ed. Losada, p. 196; Pérez d. Hita, ed. Rivad. 558b (pero cuanto más en la ed. de Sevilla, 1613, reproducida por Blanchard, I, 187); Lope, La Corona Merecida, v. 122; Vélez de Guevara, La Serrana de la Vera, v. 439; hoy son vulgares cuantimás (Guiraldes, D. S. Sombra, 127), contimás (BDHA I, 102)1, contrimás (Castro, en nota al Vergonzoso de Tirso), cuantismás (cita de Lope de Rueda en Cuervo, 660a). De construcciones semejantes se habrán extraído cuantis que y en cuantis, usados en Cespedosa (RFE XV, 252), y el primero ya en la Tragedia Policiana (1546).

Acerca de si el cast. cuan, port. quão, procede de QUANTUM por apócope o de la forma lat. QUAM, emparentada con aquella palabra, los pareceres discrepan. Cuervo (p. 663a), M. P. (Cid, 198.18),. Jeanjaquet (Rech. sur l’origine de «que», p. 67), M-L. (Litbl. XVI, 311n.; REW 6928) se inclinan por esta alternativa, mientras que Rohlfs (ASNSL CLXII, 314) se declara por aquélla. La grafía quant del Cid (v. 1591) puede tenerse en cuenta, pero no es decisiva, en un texto que emplea algunt, allent, cuya t se debe a ultracorrección; el hecho de que el italiano, más refractario a las apócopes, no haya conservado más que QUANTUM y no QUAM, y el de que en portugués antiguo y alguna vez en castellano se halle ca como representante del QUAM comparativo, son favorables a la opinión de Rohlfs2.

Paralelamente a cuanto que hallamos alguna vez cuan... que (cuán presto que tuvo fin, en Lope, La Llave de la Honra, ed. Rivad. XXXIV, 124a).

DERIV.

Cuantía [1236, M. P., D. L. 278.21; 1283, Libros de Acedrex, 302.12; 1328-35, Conde Luc.; cantía en el Fuero Real, med. S. XIII], en la Edad Media suele significar ‘suma de dinero’ (J. Ruiz, 125c; Rim. de Palacio, ed. Rivad., 304d, 568) así en español como en portugués; el sufijo es probablemente el abstracto -ÍA y no el adjetivo -IVA como supone Cornu (GrG. V, § 114); la forma fonética contía, corriente en el portugués medieval (Moraes, s. v.) vale hoy en ast. ‘cantidad justa’, ‘medida exacta’ (V) y se halla también en los pasajes citados de López de Ayala; cuantiar [APal. 387d]3; cuantioso [González Dávila, † 1658; cantioso en el Fuero de Vizcaya, S. XIV, y en Quevedo]. Cantidad [A. de Cartagena, † 1456; también quantidad, h. 1250, Setenario, fº 13 , especialmente en autores de los SS. XVI-XVII, vid. Aut., y hoy entre matemáticos], tomado del lat. quantĭtās, -ātis, íd.; cuantitativo [S. XVII, Aut.].

CPT.

Cuantayaque ast. ‘hace mucho tiempo’ < cuánt’ ha ya que..., por cruce con d’eso ha mucho resultó desayaque ‘desde hace hace mucho tiempo’, con aumentativo desayacón (V). Dacuando ‘en algún tiempo’ ast. (V), será contracción de (no lo he visto, etc.) de (y)acuanto, cuyo segundo miembro es el arcaico yacuanto ‘algo’, ‘bastante’ (para el cual vid. M. P., Cid, p. 260.6); hubo influjo de cuando (a no ser que se trate de algún derivado de éste, perteneciente al tipo leonés dalgún ‘algún’, etc., pero en este caso no veo explicación a la primera a). Gall. canté < cuanto e(s): empleado, y con frecuencia, en varios usos del lenguaje coloquial y afectivo; hay sobre todo una excelente nota de D. Alonso en RFE h. 1950; Castelao 57.20. Explicaba Sarm.: «famoso adv. gallego que se aplica a mil asuntos: afirman con él, niegan, admiran, se mofan» (CaG. 66r, 184v, 192v); se fija principalmente en el empleo «optativo» (porque le busca una etimología griega): «se dice a un niño: ¿queres peras? Responde canté», y casi-canté con los mismos significados. Lo cual indica que empezaría como locución abreviada en vez de ‘cuanto hay, casi cuanto hay’, cf. el cast. ¡lo que es eso...!, que también tiene los mismos valores diversos de la voz gallega, si bien está menos cristalizada. Luego canté non! empleado como afirmación denegativa (fr. si, lat. immo): «―seica non queres viscocho. ―Canté non!». No han sido ajenas estas locuciones al portugués, con valores un tanto distintos (en parte con variante más plena cantés o quanté(s)), aunque hoy allí son del uso norteño (Minho, Beira); quanté y quantés allí aparecen ya en autores clásicos (Camoens y Rds. Lobo). Posología, compuesto culto del gr. πóσον ‘cuánto’, voz afín a la palabra latina correspondiente.

1 Con el significado de ‘aunque’ en Chile, Guzmán Maturana, AUCh. XCII, 2.° trim., 80, y glos.―

2 Claro está que el caso de cuan es solidario de la interpretación que se dé a tan, que puede ser TANTUM o TAM paralelamente. El argumento de M-L. de que sólo con TAM se explica la forma ta empleada en el Boeci occitano de hacia el año 1000 (y hoy conservado en gascón, y en las formas tabé y tapoc del catalán de Ampurdán, Cerdaña y Rosellón), tiene valor dudoso, ya que puede tratarse de una desnasalización secundaria en idiomas que han reducido PANEM a pa; nótese que ta(n) sols, ta(n) si, etc., son paralelos a oc. pessar ‘pensar’ y e(n) so que, y que el catalán y muchas hablas de Oc tienen no como representante de NON ante verbo (no sap NON SAPIT) desde los documentos más antiguos, y otras hablas occitanas cambian VENDUNT y formas análogas en vendo.―

3 También acuantiar y acontiar, ejs. en el DHist.