COLLADO, ‘colina, otero’, mod. ‘paso bajo entre dos cerros por el cual se pasa de un lado a otro de una sierra’, derivado o compuesto del lat. C֊LLIS ‘colina’.

1.ª doc.: collato, en bajo latín, doc. de Valpuesta, 1011; collado, Berceo, S. Mill., 62c.

La voz primitiva se conservó en it. colle, oc. col1, cat. coll, port. ant. cole (ejs. del S. XVI en Moraes), y hoy también dos Colle en la toponimia de la prov. de León, y el diminutivo colliello en doc. de Monte Aragón, 1093 (vid. M. P., Oríg., 431). El significado en todas partes es ‘colina’, menos en catalán, donde esta ac. está en concurrencia con la de ‘paso entre montañas’: la primera es común en la Edad Media, y hoy sobrevive en el Llano de Urgel, Ribera de Ebro, Maestrazgo y Mallorca principalmente; pero la otra se halla también desde el S. XIII: vid. ejs. en Alcover, y R. Martí da este sentido al lat. collis, traducido por el mozár. portél y por una palabra arábiga que significa ‘puerto de montaña’ (Simonet, s. v. portél).

Sabido es que éste es el significado del fr. col, y a oc. ant. cola ‘colina’, piam. colla «giogo di monte» corresponde Ossola côla «sella di monte» e igual ac. en otros valles de los Alpes occidentales, Lombardía, Tesino y en la toponimia bávara (Jud, Rom. XLV, 570; VRom. III, 335). Un paralelo semántico se nos ofrece en JŬGUMcresta o cordón de montaña’, también ‘cumbre’, it. giogo ‘cumbre’, al cual corresponde Jou o Coll de Jou como nombre frecuente de pasos serranos en los Pirineos orientales (p. ej. en los términos de Capolat, Alp, Montellà, Gósol, Castellbò, Estaon). El tránsito semántico se explica porque el puerto o collado es el punto más alto2 que huella el caminante al trasponer la sierra, es, por lo tanto, el summum jugum, como le llama César, el Cap del Port, como dicen en el Pallars y Arán, o la Cumbre, que es nombre de varios pasos de los Andes argentinos, o Som Port, nombre del célebre puerto pirenaico aragonés. No es posible, por lo tanto, admitir que el fr. col represente el lat. C֊LLUM ‘cuello’, como se hace generalmente, ni hay necesidad de hacer intervenir un cruce con esta palabra para explicar la nueva ac. según hizo Montoliu (BDC III, 45), con la aprobación de algunos romanistas. En español la ac. ‘paso entre montañas’ no aparece hasta Acad. 1899, aunque Pagés la señala a principios del siglo en Martínez de la Rosa; los testimonios clásicos y medievales dan unánimemente el significado ‘colina’3 o bien son equívocos. Sin embargo existe un problema formativo: no se comprende por qué se formaría un derivado en -ado de tal sustantivo ni el valor que ahí tendría esa terminación; teniendo sobre todo en cuenta que en la toponimia de la Ribera catalana del Ebro (en el Pinell del Broi, al S. de Mora) aparece Lo Collat o Los Collats como nombre de una colina ancha, me inclino a creer que el cast. collado (en el sentido que le daban los antiguos desde Berceo hasta Fr. Luis de León) viene de COLLIS LATUSloma ancha’.

DERIV.

Collada ‘depresión entre montañas’ [«passa el rio alas colladas de Canales», doc. León, 1175, M. P., Oríg., 292; ast. ‘garganta de un monte’, V]. Colladía. Colladiello.

1 En la Vida de Sant Honorat el vocablo lleva el artículo femenino la; en el otro testimonio medieval no se ve el género. Debería comprobarse bien la lectura manuscrita. En los demás romances y en provenzal moderno el vocablo es masculino; sin embargo, vid. cola más abajo.―

2 También hallamos esta ac. en el cat. coll: «aquesta montanya, en lo coll de la qual tu e yo som». Antoni Canals, Scipió e Aníbal, 57.―

3 «Cambióse del otero, buscó otro collado», en Berceo; «col(l)is: collado» en el glosario de Toledo; íd. en APal. 81d, 93d, 174b; «oh, dinero... no hay dificultad en el mundo que para ti lo sea, ni... cuesta que no allanes, ni collado humilde que no ensalces», H. de Luna, Lazarillo, ed. Rivad., p. 119. Más en Aut., en Pagés, etc.