CHALAR, and., caló, ‘enloquecer, alelar’, voz jergal de procedencia gitana.
1.ª doc.: chalado, Demófilo, Cantes Flamencos, 1878; Acad. 1884 (no 1843); chalarse, Pagés, 1901 (con cita de Ricardo de la Vega).
Parece tratarse del gitano chalar ‘ir, andar, caminar’, de origen sánscrito (Borrow, p. 400), comp. el caló catalán atxalar ‘ir’, xalar ‘huir, ir de prisa’ (M. L. Wagner, Notes Ling. sur l’Argot Barc., 32). El cambio semántico de ‘ido’ en ‘enajenado, loco’ es muy fácil. Sin embargo, según Schuchardt, ZRPh. V, 268, se trataría de la confusión entre dos palabras gitanas diferentes, chalao ‘ido’ y un gitano charlao ‘loco’; sin embargo, no puedo comprobar la existencia de éste en Miklosich ni en Borrow. Clavería, en su libro reciente Est. sobre los gitanismos, 152-7, confirma que charlao no es antiguo en gitano (aunque chaslao ‘loco’ ya aparezca en un texto sevillano de 1847), y corrobora la etimología de Wagner recordando que guillarse, pirar (propiamente ‘marcharse’) también tomaron el sentido de ‘volverse loco’; por otra parte, también se ha empleado charlarse para ‘marcharse’. En su opinión las formas con -r- (< -s-) se deben a una confusión del chalar agitanado con el común charlar, confusión natural en la pronunciación andaluza. Me parece bastante seguro. El transitivo chalar ‘enloquecer’, que falta todavía en Acad. 1899 y en Pagés, pero se halla más recientemente en Cristóbal de Castro (cita de Toro, RH XLIX, 409), debe de ser creación secundaria; también lo es el paso de ‘enloquecer’ a ‘enamorar’. No es cierto que tengan igual origen jalar y chalar ‘enamorar’, como sugiere G. de Diego, RFE III, 308. Claro que no del fr. ant. chaloir ‘importar’ (GdDD 1274).
DERIV.
Chalado (V. arriba).