CHALANA, ‘embarcación menor, de fondo plano’, del fr. chaland íd., y éste del b. gr. χελάνƌιον íd.

1.ª doc.: 1831, Dicc. Mar. Esp.; Acad. 1884, no 1843; en el argentino Ascasubi, 1850-70, Santos Vega, v. 8072.

Chaland es palabra antiquísima en francés, donde ya se halla en la Chanson de Roland, y entró en el idioma a raíz de las Cruzadas. En griego se documenta desde el S. XII (FEW II, 633b). En español parece ser palabra reciente. Hay también cat. xalana (que no puedo fechar); el port. chalana es «barco espanhol para transporte de mercadorias» (Fig.), por lo tanto se tomaría del castellano. El cambio de género y el añadido de la -a (comp. prov. chaland), pudo producirse en castellano por influjo de barcaza u otro sinónimo castizo, pero en vista del bilbaíno chanela ‘chalana, embarción menor’ (Arriaga, Revoladas, s. v.), y vasco vizc. y guip. txanel íd. (Azkue), con artículo txanel-a―que parece ser metátesis producida en vasco―, creo que la -a de chalana es debida a una aglutinación del artículo vasco, durante el paso del vocablo francés al castellano a través de las Vascongadas.

No está claro, ni mucho menos averiguado, que el gall. chaleiro ‘lancha grande que usan los de la Guardia’ (frontera gall.-portuguesa) (Sarm. CaG. 98v) derive del mismo origen que chalana, ni tenga relación íntima y antigua con las palabras que allí (pp. 176-7) se juntan; nexo indirecto sí es probable, y algo más con el port. cheleira, chal- ‘depósito de mercancías en la sentina’, ‘pieza donde se encajan los baldes a bordo’, gall. chaleira ‘cajita de madera donde guarda útiles el cocinero de las lanchas pescadoras’ (Carré) (cf. cat. xalera ‘abertura de las cloacas en la acera de las calles’ viejo localismo barcelonés o empordanés. El origen de este vocablo port. cheleira debe de ser mozárabe, de CELLARIA ‘bodega’. Por lo demás, en todo este grupo hay mucho cruce de palabras.