CELIDONIA, tomado del lat. chelidŏnĭa íd., y éste del gr. χελιƌóνιον íd., neutro de χελιƌóνιος ‘semejante a la golondrina’ (χελιƌǠν, -óνος), por el color azul oscuro del algunas variedades, semejante al de este pájaro.

1.ª doc.: APal., 69b.

Se emplearon otras formas más populares: ciridueña («c: hierba de golondrina; chelidonia»), en Nebr., comp. ast. cirigüeña; celidueña [1565, etc., DHist.], vco. vizc. sarandoi. Para nombres romances de esta planta, vid. Bertoldi, ARom. VII, 275 ss. La denominación griega de esta planta dió lugar a leyendas etimológicas, como la que relata APal., relativa a la curación de los ojos de sus crías por parte de las golondrinas.

DERIV.

Celidónico. Celidonato.