BRUMA, ‘niebla’, del lat. BRȢMAinvierno’.

1.ª doc.: princ. S. XVII, Ruiz de Alarcón.

Anteriormente, ya desde Juan de Mena (Aut.), se halla la ac. latina ‘invierno’ (no está claro cuál de las dos figura en APal., 49b). Para la forma catalanizante broma, vid. BROMA I.

DERIV.

Brumazón [1831]. Brumoso [1627].