BASTIR, ant., ‘construir’, de oc. bastir íd., y éste del germ. *BASTJANtejer, trenzar’ (comp. a. alem. ant. bsten ‘remendar, zurcir’).

1.ª doc.: Alex., 1439d (O y P).

Es difícil asegurar hasta dónde llegan las acs. castizas del antiguo bastir (para éstas, vid. BASTO I) y dónde empiezan las forasteras. De todos modos es probable que la de ‘construir, edificar’ pertenezca a estas últimas, ya que esta ac. sólo es popular y antigua en francés, occitano y catalán. Se explica este significado romance por el primitivo procedimiento germánico de construir casas entretejiendo cortezas de árboles, comp. su. fr. basi (< bastir) ‘hacer un embalse’, cat. bastir ‘revestir la pared de un pozo o de una zanja’ (Ampurdán, Priorato); aunque Lerch, Mélanges M. Roques II, 175-202, defiende la tesis de que hay que partir de *BASTJAN en el sentido de ‘coser’ y no en el de ‘tejer con corteza’. Creo tendrá el mismo origen el ast. bastir ‘derribar’ que intrigó a M-L. (WS I, 31), pues, aunque también se refiere hoy a personas (V), se emplea con referencia a árboles cortados por el leñador, como se ve por el artículo tora de Rato: abundando en Asturias la edificación con madera se comprende el tránsito de bastir ‘construir’, empleado absolutamente, a la idea de hacer las cortas necesarias para la edificación.

DERIV.

Vid. s. v. BASTO I.