BACÍA, voz emparentada con BACÍN, y con varias palabras del latín tardío: baccea, bacchinon y bacar; el origen último y los pormenores relativos a la forma de bacía son inciertos, pero es verosímil que en España proceda de allende el Pirineo, quizá del fr. antic. bassie íd., que parece ser forma dialectal correspondiente a un lat. vg. *BACCEATA, derivada del citado BACCEA.

1.ª doc.: 1368. El diminutivo bacieta ya en 1331, Inv. arag., BHisp. LVII 449.

La documentación es tardía. El DHist. sólo registra ejs. del S. XVI, aunque Nebr. ya lo cataloga (escrito con c), como sinónimo de bacín. Además puedo señalar fuentes aragonesas de 1368, 1379 y 13971. Pero los Aranceles Santanderinos del S. XIII (RFE, VIII, 19) y varios textos del XIV (J. Ruiz, Castigos del Rey D. Sancho, Sumas de Leomarte) sólo conocen bacín, que a juzgar por su terminación no debe de ser autóctono; igual les ocurre aún a Guillén de Segovia (p. 79) y a APal. (80b, 352b; escrito con ç en todas partes). Port. bacia y bacio (de menor ruedo que la bacia), gall. bacía. En catalán sólo existen baci2 y bàcia, con acento en la primera silaba (como en Aveyron bássio); y es dudoso que haya representantes del tipo en -ía fuera de la Península, pues el cremonés bázia y si boloñés bäzya3 se acentúan en la primera vocal, ignoramos la acentuación del logud. ant. bacias d’argentu4, y el fr. medio bassie, hoy vivo en varios dialectos del centro de Francia, parece ser alteración de baciée *BACCEATA, luego sólo quedarían Perigord y Tarn bassio, que podrían ser galicismos (FEW, s. v. *BACCIA)5. Gamillscheg, ZRPh. XLIII, 548-9, parte de un galo *BAKKզDIA, adjetivo derivado de un BACCA, que se halla en glosas isidorianas, y cree que el fr. med. y dial. basse es regresión de bassie, bassière, y que Aveyron bássio tiene acentuación secundaria, por bassío. Pero el sufijo -զDIA es problemático desde el punto de vista céltico (Pedersen, Litteris, II, 83), la existencia de la variante bassée junto a bassie confirma el étimo *BACCIATA admitido en el FEW, y un cambio de acento difícilmente se podría admitir en el cat. bàci, bàcia; para la conservación algo irregular de la i en éstos, cf. cossi *COCEUM (REW, 2011.3). Estas formas recuerdan el hispano-lat. BAC(C)EAvasija para agua’ de San Isidoro (Etym. XX, v, 4), palabra que ignoramos dónde se acentuaba, mas en principio tiene más probabilidades la acentuación en la A, cuya existencia se comprueba por las formas de la Alta Italia y quizá por el miñoto bassa ‘tinaja’ (LouçƟo, RL XXIX, 249). De suerte que para una acentuación BACCÉA no queda otro apoyo que el hispano-port. bacía6. En vista de la fecha y lugar de aparición es razonable la sospecha de que éste se tomara también, sea del gascón bassie ( < bacina) o del fr. bacie (*BACCEATA). En cuanto al origen, sólo podemos asegurar que hay parentesco con la citada palabra isidoriana y con BACCHINON (> bacín), empleado por Gregorio de Tours; quizá también con la palabra BACAR citada por Festo. La etimología última no es menos dudosa. M-L., RFE, VIII, 230n., y REW 863b y 866, conjetura que sean de procedencia africana, pero sin otro fundamento que el tardío argelino bāgiya, y la posibilidad, a su vez incierta, de que el fr. carcan (ya documentado en la Francia merovingia, como bacchinon) venga del árabe. Que sean derivados del lat. Bacchus en la acepción de ‘vino’, según la idea de San Isidoro desenterrada por Carnoy, MLN XXXII, 396-7, carece de toda probabilidad mientras no hallemos testimonios fidedignos de que bacar y baccea se emplearon especialmente para beber vino; no es muy orientador el nombre de vaca de un tipo de recipiente usual en la cerámica barcelonesa de fines de la Edad Media (vid. Marçal Olivar, grabados en su libro sobre la historia de la cerámica antigua de la Corona de Aragón, Barcelona, Salvat, h. 1945) que, aunque tiene a menudo la forma de un animal cornudo, esto puede ser debido a una etimología popular. Y el origen galo no halla apoyo firme en el celta insular, pues la raíz bacc- significa ‘curvatura’, especialmente ‘gancho’ (Thurneysen, Keltorom. 39), y el escocés bac ‘agujero, hondonada’ («a hollow»), citado por Gamillscheg, no puede citarse en su apoyo, como observa Pedersen, Litteris II, 83. Aunque falte apoyo etimológico en el celta insular, hace pensar en un origen galo el hecho de aparecer el mismo radical en la forma bacausas ‘bacías de bronce’ («concas ereas») de un glosario citado por Holder, hacia la cual llama Bolelli (It. Dial. XVII, 142) atinadamente la atención, agregando que BACAUSUS se halla también como nombre de persona en el Noricum y que de BACAUSA tal vez procedan (pese a las dificultades fonéticas) el piam. ant. bo?a «acqua stagnante», Valsesia boggia «cavità del terreno», Como bôza, bôz «pozzanghera». Realmente la terminación de BACAUSA sugiere un origen galo, como el de ALAUSA, NEMAUSUS, LEMAUSUM (sin hablar de otros sufijos galos en AU: ALAUDA, NAUDA, BAGAUDA, BASCAUDA, MUSGAUDA, AGAUNUM).

1 Una bacia grande do fazen las candelas de sevo, Serrano y Sanz, Inventarios, BRAE IV, 345; Una bacia chica, larga, de trascolar, íd. II, 710; una bacia de fust redonda íd.; y tres más, donde se habla de una bacia de masar (en uno la variante macia), íd. IV, 217, 219, 345.―

2 Cf. el árabe marroquí Ǥ ‘palangana’ y Ǥa ‘balsa grande’ que cito a propósito de BACHE; junto con el cat. baci (que es palabra de más allá del Ebro) hacen bastante verosímil que BACCĔA diese Ƈya ~ baƇyo en mozárabe y que de ahí procedan los dos vocablos magrebíes y el catalán meridional con cambio de Ƈ en ç al catalanizarse éste.―

3 Baxia «bacile» está ya documentado en Monza, en 745, VRom., III, 201.―

4 En el Condaghe de Trullas, año 1220. Aunque Wagner, VRom. V, 163, lo cita entre los casos de influjo castellano o catalán, no hay entre ellos ninguno cuyo origen castellano sea admisible, como es de esperar en fecha tan temprana.―

5 Las formas gasconas bassie, bassio, bassiot, pueden salir de bacina. En cuanto a Aspa bàssou ‘vaso de beber’ (así en el Valle de Arán), viene del cast. vaso.―

6 El ár. argelino bāgiya «auget; écuelle en bois; mesure de capacité d’environ un kg.». (Beaussier) no consta donde se acentúa, se puede dar por seguro que en la primera sílaba, en vista del plural bawâgī (si fuese bāgîya, el plural sería seguramente -īyât). Nótese la g oclusiva que demuestra origen no arábigo; probablemente una voz bereber de origen romance. Supone Baist (KJRPh. IV, 320) que se tomó del fr. baquet, lo cual es muy inseguro.