AÍNA ‘de prisa’, ‘pronto’, ‘fácilmente’, de un antiguo sustantivo aína, procedente del lat. vg. AGզNAactividad, prisa’, y éste de AGĔREconducir, empujar’.

1.ª doc.: Cid.

Cuervo, Ap.7, § 136. Quedó anticuado desde el S. XVII, y ya antes en las dos primeras acs.; Quevedo ridiculiza ya su uso en el Cuento de Cuentos (ed. Cl. C, p. 186); ast. aina ‘pronto’ (V, R), aína ‘temprano’ (Canellada). Algo más se conservaron ciertas locuciones compuestas, como más aína ‘más bien, de preferencia’, todavía frecuente en Cervantes1, no tan aína(s) y por aínas ‘por poco’, usadas en Bogotá, en aínas o en ainiticas en la América Central (Gagini; Malaret, Semánt. Amer., 83); acentuado áinas, como en América, se oye aún en Cespedosa (RFE XV, 159).

El vocablo latino ha dejado descendencia sólo en ciertos dialectos italianos (Centro y Abruzos), castellanos y gallegoportugueses2. En éstos vive todavía el gall. axiña ‘pronto’ (RL VII, 203), axiña ‘en seguida’3, trasm. ajinha, asinha ‘inmediatamente’ (RL I, 203), ‘pronto’ (Krüger, Homen. a M. P. II, 131), Beira Alta tan-ajinha (RL II, 284), y aginha ‘de prisa, pronto’ se halla en la lengua común desde las Cantigas de S. María4 y el Canc. de la Vaticana hasta el S. XVII (RH LVII, 565; RL XXVII, 8; C. Michaëlis, Homen. a M. P. III, 469-71); no los pueden tan an-ayna dar, en doc. de 1277 del Bierzo (Sarm. CaG. 143 v). En Italia hallamos ’n grande aìna en la Canción del Castra, poeta marchigiano del S. XIII, citada por Dante, De Vulgari Eloquio, I, II; ’n agina ‘de prisa’, en el abruzo Buccio de Ranallo (1330), y en otros textos5. El sustantivo abstracto AGINAprisa’ no está, pues, documentado aisladamente en lengua romance, aunque no puede dudarse de su existencia, pues el verbo aginare ‘agitarse, menearse, trafagar’ se halla en Petronio y en glosas, y está bien documentado agina en la ac. concreta ‘agujero en el que se mueve el fiel de la balanza’. Este verbo AGINARE dió el abruzo ajinarse ‘apresurarse’, port. aginhado, cast. ainado en Lucas Fernández6, y con el mismo prefijo (ANTE-) que antuviarse junto a uviar, hallamos el ast. antainar ‘apresurarse’ (R, V), para el cual puede verse M. P., Rom. XXIX, 374. El paso del abstracto AGINA al adverbio romance se explica por la añadidura de una preposición, que fué in en italiano, y en portugués y castellano fu una a, confundida pronto con la inicial de AGINA, pero que todavía se distingue en Berceo ad ahina ‘muy presto’ (cogiérons’ ad ahina ‘se fueron luego’, Mil. 278).

1 Dos ejs. en el DHist. Además en La Gitanilla, Cl. C. I, 51.―

2 También val. tan aïna, més aïna ‘tan, más fácilmente’ (M. Gadea, Tèrra del , 168, 465; Alcover; maestr. més aïnes, G. Girona). Hay ya dos ejs. del S. XVI. Pero como el vocablo es ajeno a los demás dialectos catalanes (observa Giner i March que aïna es hoy ajeno por lo menos a la zona central del Reino de Valencia), y en esta lengua Gi suele conservarse (fagina, fregir, etc.), deberá ser préstamo castellano, a no ser que venga del mozárabe local. No debe confundirse con el cat. ant. aïna ‘ocasión’ (Jaime I, Desclot), hoy cat. eina, val. aïna, ‘herramienta’, que tienen origen completamente distinto (oc. ant. aizina ‘ocasión’, ‘herramienta’, derivado de un equivalente del fr. aise ADJCE(N)S, vco. aise, aisi < aisia < aizina).―

3 «Axiña que o dependente se perdeu, remaneuceume o medo» Castelao 194. 11, 193.1, 60.12, 213.3f.―

4 Aginna (-a) Ctgs. 13. 17, etc., MirSgo. 42.8, 44.16, 51.18, 69.2. También ‘con facilidad’ Ctgs. 11.4.―

5 Vid. ARom. V, 60; Mussafia, Wiener Sitzungsber. CX, 413.―

6 Spitzer, Lexik. a. d. Kat., 153, agrega and. ainar ‘esforzarse’.