ARGAMULA, and., de algamula y éste de una forma hispanoárabe *Ʌamûla (también Ʌalûm íd.).

1.ª doc.: Nebr., «argamula, ierva: amellus».

Es nombre de la lengua de buey (Anchusa Italica, Retz.: Colmeiro, IV, 111) y de la Alkanna Tinctoria Tausch. (ib., 122), y se emplea en Andalucía según la Acad., pero también en Cespedosa (RFE XV, 277) y en la Beira (Fig.). Boissier, según Colmeiro, recogió en 1837 la forma algamula eh el Sur de España. Aunque nadie ha estudiado el origen de esta palabra, se trata evidentemente de una variante del ár. Ʌalûm ‘ancusa’ (Abenbuclárix), Ʌālûm (Abenalbéitar: Dozy, Suppl. I, 318a), cuyo nombre de unidad había de ser Ʌalûma (Ʌā-). Por otra parte, como nombre español de la misma planta da asimismo Abenalbéitar (Dozy, I, 322a) Ʌ-m-y-rā sin vocalizar, y aunque uno de los manuscritos indica que el m es doble, creo más bien que debe leerse Ʌumáȳrā, es decir, el diminutivo femenino de ȐáɅmar ‘encarnado’, teniendo en cuenta que la ancusa se llama también asperón encamado o raíz del fuego (o. c.), que la Alkanna es planta tintórea, y que a ambas plantas se las ha conocido también con el nombre de la orcaneta, cuya raíz tiñe de rojo, como es sabido. Me parece, en consecuencia, que de otra forma de la misma raíz Ʌ-m-r ‘rojo’, pero con el cambia de r en l, tan frecuente en España (BDC XXIV, 76), viene la forma hispanoárabe *Ʌamûla, de donde salen por una parte nuestro argamula, y por la otra, con metátesis, la forma documentada Ʌalûm (Ʌā-).