ARABESCO, del it. arabesco íd., derivado de arabo ‘árabe’, por ser este adorno característico del arte musulmán, que no admite representación de imágenes.
1.ª doc.: 1567.
Terlingen, 103. En italiano, ya en 1499, y de aquí pasó a las varias lenguas europeas. Empleado como adj. en el sentido de ‘arábigo’, en A. de Morales, es también italianismo del S. XVI. Sainéan, Sources Indig. II, 237n., protesta con razón contra el inexistente lat. vg. *ARABISCUS, supuesto sin necesidad por el REW, 589. De árabe hay variante antigua muy corriente: alárabe y alarbe (1499, traduc. castellana del De Mulieribus Claris de Boccaccio, fol. 54r°), cat. alarb, el cual se emplea también en el sentido figurado de ‘huraño, arisco’; de ahí el roncalés alarbe y suletino alabre «individu sauvage».
DERIV.
de árabe: Mozárabe [doc. de 1115, Oelschl.; muçaravi, doc. de 1024, Neuvonen, 51], del ár. mustá⺆rib participio activo de Ȑistá⺆rab ‘hacerse semejante a los árabes’, que a su vez es derivado del nombre nacional de los árabes; mozarabía.